El caso de las tres chicas secuestradas en Cleveland ya tiene a su héroe: Charles Ramsey. El vecino de la localidad fue quien liberó a una de ellas, casi por casualidad. En una de las muchas entrevistas que ha relizado tras hacerse pública la liberación de las jóvenes, el propio Ramsey explicó lo sucedido. Con naturalidad, y aún conmocionado por lo sucedido, relató cómo iba al McDonalds a por un "Big Mac" cuando oyó gritos en la casa de su vecino.
"Vi a esa chica volviéndose loca y tratando de escapar", explica. Amanda Berry no lograba abrir la puerta de la casa donde pasó 10 años secuestrada, y él la tiro abajo: "Por suerte era de alumino", señaló. “Fui a la puerta y me dijo, ayúdame a salir, he estado mucho tiempo aquí”. “Salió de allí con una niña pequeña y dijo llama al 911, mi nombre es Amanda Berry".
Charles Ramsey confesó que al principio no se percató de quién era, pero mientras estaba llamando, cayó en la cuenta y se dijo "pensaba que esta chica estaba muerta". Fue cuando la joven cogió el teléfono y le dijo a la policía “Sí, soy Amanda Berry”, en una llamada agónica que ha hecho pública la policía. Ella misma le explicó a la policía que en la casa había otra chica secuestrada. El vecino de Cleveland también vio a una niña pequeña, que corría hacia sus brazos: "Hermano, supe que algo iba mal cuando una pequeña niña blanca corría a los brazos de un hombre negro", dijo en otra entrevista. Se trataba de la hija de Amanda Berry, que había tenido con su secuestrador y que ahora tiene 4 años.
Además, Ramsey se mostró visiblemente sorprendido porque el secuestrador fuera su vecino: "Le veía todos los días, quiero decir, todos los días". “Había estado allí hacía un año. Hice barbacoas con ese tipo. Comimos costillas, escuchamos música de salsa”, dijo, señalando que jamás había visto “ni una pista” de que cualquiera de las chicas estaba ahí.
Charles Ramsey está causando sensación en las redes sociales, donde ya se le ha apodado "el héroe del Big Mac", alabando su actuación.