Poco después de cerrarse las mesas electorales en New Hampshire, las principales cadenas de televisión estadounidenses dieron a los vencedores de las primarias: el magnate Donald Trump por el lado republicano y el senador Bernie Sanders por el demócrata.
Las encuestas apuntaban desde hacía semanas a una más que probable victoria en este estado de Trump y Sanders, que quedaron segundos en los caucus (asambleas populares) de Iowa la semana pasada, por detrás de Ted Cruz, el primero, y de Hillary Clinton, por una mínima diferencia, el segundo. Uno de los grandes interrogantes era el margen por el que Sanders vencería a la ex secretaria de Estado Hillary Clinton en un estado que ella ganó en las primarias de 2008.
Entre los republicanos era importante ver quién quedaba en segundo lugar, un premio que se disputaban Cruz; el gobernador de Ohio, John Kasich; el exgobernador de Florida, Jeb Bush; el senador Marco Rubio y el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie.
Con el 73% escrutado, Trump contaba con un 34,6% de los votos, seguido de Kasich con un 16,2% y de Cruz con un 11,5%; mientras que Bush lograba un 11,2%, Rubio un 10,5% y Christie un 7,6%. En cuanto a los demócratas, con el 73% escrutado, Sanders ganaba con un 59,6% de los apoyos, mientras que Clinton acumulaba el 38,7% de los votos.
Reacciones de los ganadores
Durante su discurso al final de la noche y ya confirmado su primer lugar, Trump dijo acompañado de su esposa, Melania, que "vamos a hacer algo tan bueno, tan rápido y tan fuerte que el mundo nos volverá a respetar. Creedme". Prometió además que acabará con la "epidemia" de heroína y drogadicción que sufre New Hampshire y el resto del país, y cuya raíz vinculó con la inmigración y el tráfico de drogas que entran en Estados Unidos por la frontera sur. "Vamos a construir el muro, lo crean o no. No es una cosa tan difícil de hacer", reiteró el magnate inmobiliario respecto a una de sus propuestas de campaña más polémicas para tratar de evitar la llegada de inmigrantes a suelo estadounidense.
Asimismo, Trump llamó a sustituir la reforma sanitaria promulgada por el presidente Barack Obama, conocida como Obamacare, y acusó a la actual Administración demócrata de maquillar los datos de desempleo, que este mes se situó en el 4,9%, la primera vez desde 2008 que baja de la barrera del 5%. También aludió a la "protección de la sagrada segunda enmienda" de la Constitución estadounidense, que otorga el derecho a portar armas, y puso como ejemplo el caso de Francia al afirmar que "pese a ser uno de los países con las leyes más duras sobre el control de armas" no pudo evitar que entraran "esos animales", en referencia a los atentados yihadistas de París del pasado mes de noviembre.
Del lado demócrata y tras conocer su holgada victoria, Sanders señaló "juntos hemos enviado un mensaje que resonará de Wall Street a Washington, desde Maine a California, de que el Gobierno de nuestro gran país pertenece a todo el pueblo y no solo a un puñado de ricos contribuyentes a las campañas". El senador aseguró que la alta participación en las primarias de New Hampshire demuestra que su campaña "cosecha el entusiasmo que el partido demócrata necesitará para tener éxito en noviembre", en las elecciones generales.
"Lo que comenzó la semana pasada en Iowa, lo que confirmó New Hampshire hoy, no es nada menos que el comienzo de una revolución política, que unirá a millones de personas", aseguró Sanders al final de un largo discurso en la localidad de Concord. "Unirá a negros y blancos, latinos, estadounidenses de origen asiático, nativos estadounidenses, heterosexuales y gais, hombres y mujeres, personas que nacieron en Estados Unidos y personas que migraron a este país", agregó.