El jefe del Comité de Inteligencia de la Cámara baja de EE.UU., el legislador republicano Devin Nunes, ha asegurado hoy que no ha visto pruebas de un supuesto complot entre la campaña del ahora presidente estadounidense, Donald Trump, y Rusia durante el proceso electoral de 2016.
"Le daré una respuesta muy simple: No", respondió Nunes durante una entrevista en la cadena Fox cuando le preguntaron por este tema y recalcó que no existe "evidencia de complot" entre el equipo de campaña de Trump y Rusia con objeto de interferir en las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos en favor del magnate.
Las declaraciones de Nunes se producen un día antes de la primera audiencia pública en el Congreso sobre la supuesta injerencia rusa en los comicios que ganó Trump, la cual se celebrará precisamente en el Comité de Inteligencia de la Cámara baja. En esa audiencia está previsto que testifique, entre otros, el director del Buró Federal de Investigaciones (FBI), James Comey.
El Comité de Inteligencia de la Cámara baja es el encargado de estudiar la presunta injerencia del Gobierno ruso en las elecciones presidenciales, investigación en la que Trump solicitó que también se incluyeran las supuestas prácticas de escucha ilegal en su contra que, según él, llevó a cabo el Ejecutivo de su predecesor, Barack Obama.
Hasta ahora tanto Nunes como los líderes del Comité de Inteligencia del Senado han asegurado que no tienen pruebas de que el Gobierno de Obama interceptase las comunicaciones de la Torre Trump, donde el ahora presidente vivía y trabajaba durante la campaña electoral.
No obstante, el presidente se ha mantenido firme en su acusación y el pasado viernes, durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca junto a la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que ambos tienen "algo en común": haber sido espiados por orden de Obama.
En una entrevista el pasado miércoles con la cadena Fox, Trump afirmó que "pinchar un teléfono abarca muchas cosas" y que se verán "algunas cosas muy interesantes que van a pasar a un primer plano en las próximas dos semanas", lo que, según la Casa Blanca, significa que va a salir a la luz más información sobre la acusación contra Obama.