
El pasado 13 de enero, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, prometió con bombo y platillo un "decreto contundente" para agilizar la reconstrucción de viviendas y negocios arrasados por los incendios que aún devastaban la ciudad. Empleando términos como "rápidamente" y "acelerar", Bass actualizó la declaración de emergencia local para, supuestamente, impulsar la recuperación de los barrios afectados. Pero, como era de esperar, la maquinaria burocrática municipal funciona a un ritmo cuyo modo más rápido rivaliza con tortugas y glaciares.
A fecha de este lunes 24 de marzo, setenta y cinco días después de los fuegos, el ayuntamiento ha concedido la ridícula cifra de... cuatro permisos de reconstrucción. Un fiasco que pone en evidencia la ineficacia de Bass y su equipo.
El 18 de marzo, Rick Caruso, empresario y rival de Bass en las elecciones de 2022, rechazó apoyar un referéndum para destituirla, a pesar de haber criticado duramente su gestión. "Hay que reconstruir, no dividir con politiqueo", declaró a NBCLA, instándola a centrarse en la recuperación, los Juegos Olímpicos de 2028 y la crisis de los sintecho.
A mayoral recall right now is not a good idea. This is a time when Los Angeles needs unity, not costly and expensive political distractions. We must rebuild our communities, get people back into their homes, and open businesses that have been closed or lost. That must be our…
— Rick J. Caruso (@RickCarusoLA) March 18, 2025
Destituir a un alcalde en Los Ángeles es complicado, pero no imposible. Harían falta unas 330.000 firmas válidas, lo que, para asegurarse, posiblemente requeriría al menos 400.000 firmas sin revisar. Y aunque las primeras 100.000 o 200.000 serían relativamente sencillas de obtener, a partir de ahí el esfuerzo, y el coste, se dispararía, según informa La Times. Incluso aunque todo fuera como la seda, Bass seguramente no sería sustituida hasta verano de 2026, pocos meses antes de las elecciones de noviembre, lo cual posiblemente explique la decisión de Caruso.
En contraste con la lentitud en que concede los permisos de reconstrucción, sorprende la velocidad con la que Bass ha contratado por 10 millones de dólares a una consultora privada, Hagerty Consulting, para supervisar la recuperación, una decisión que ha levantado ampollas. "Tenemos departamentos municipales que saben hacerlo y han gestionado recuperaciones antes", denunció la concejal Mónica Rodríguez a ABC7. "¿Y no pueden contratar personal, pero sí pagar 10 millones a una empresa externa por un informe? Es obsceno".