El papa Francisco ha recibido en audiencia al expresidente del Gobierno Felipe González y al director de orquesta argentino Daniel Barenboim, con los que ha hablado sobre la paz en Oriente Próximo y sobre el esfuerzo "simbólico" que realiza West-Eastern Divan Orquestra, formada por músicos israelíes, palestinos y de diversos países árabes.
Tras el encuentro, González ha subrayado que el Pontífice le ha impresionado, desde un punto de vista no religioso, por algunos de los gestos de apertura que ha realizado y que indica su voluntad de reforma. Asimismo, ha recordado una anécdota que el propio Baremboim contó durante el seminario sobre la paz en el que ambos participaron en Buenos Aires el pasado mes de agosto.
González ha explicado que Barenboim cerró la conversación recordando cómo un chico palestino y otro israelí de la orquesta habían hecho un solo de clarinete y oboe, respectivamente, y cómo estaban tensos escuchando los unos a los otros y deseando que acertaran. "Ese es el camino de la paz, que las dos partes quieran que al otro le salga bien", ha resumido.
Por su parte, Barenboim, que no conocía al Papa en persona hasta este lunes, ha puntualizado que Francisco está interesado y preocupado por problemas de toda índole y no sólo directamente con los relacionados con su actividad papal, lo que ha calificado de "extraordinario". De este modo, le ha definido como un hombre de "gran visión" y ha admitido que se emocionó "muchísimo" con el viaje del Pontífice a Tierra Santa. "Salgo muy feliz y honrado de que me haya recibido y escuchado y él sabe que estoy a su servicio para cualquier iniciativa que pueda tomar que se refiera a este conflicto", ha asegurado.