
El jefe de la diplomacia comunitaria, que lleva semanas negociando con las autoridades venezolanas las condiciones y términos del despliegue de observadores, ha dado el visto bueno a la misión después de recibir garantías por parte de Caracas sobre el acceso y el alcance, según fuentes europeas confirman a Europa Press.
Borrell defiende la necesidad de estar presentes en el terreno para que los comicios venezolanos sean plurales y cuente con unas condiciones democráticas mínimas que el régimen chavista nunca ha respetado. Así, la UE observará unas elecciones en Venezuela por primera vez desde 2005.
El grupo de expertos realizará tareas de seguimiento técnico previo a la votación y observará los comicios de noviembre, además del proceso posterior. En otros casos, este tipo de misiones ha llegado a durar hasta tres y cuatro meses, aunque por lo general los resultados han sido más bien magros.
La líder de la misión menos adecuada
La diplomacia comunitaria ha confirmado en un comunicado que la socialista portuguesa Isabel Santos liderará la misión, que constará de un primer equipo de 11 expertos electorales que se desplazarán a Caracas en octubre. Posteriormente se sumarán otros 62 observadores técnicos de largo plazo, más otra treintena cuando se acerque la fecha electoral.
Se da la circunstancia de que Santos es una persona muy cercana a José Sócrates, ex primer ministro portugués que ha sido acusado de ser el centro de una trama de corrupción en la que habría recibido cantidades multimillonarias desde Venezuela.
La hoy eurodiputada fue uno de los muy pocos miembros destacados del Partido Socialista portugués que defendió a Sócrates en el momento más difícil de su caída política: "A diferencia de otros, yo nunca he renunciado a mis amistades, nunca renegaré de ellas bajo ningún concepto, la amistad es un valor que me enseñaron a conservar, José Sócrates es mi amigo y compañero", dijo.
Sócrates aún tiene pendientes acusaciones judiciales por lavado de dinero y falsificación de documentos públicos.
Sin consenso en el PE
En este contexto, queda por ver si el Parlamento Europeo decide desplegar eurodiputados. Normalmente la Eurocámara refuerza la observación técnica con una delegación que ejerce labores de seguimiento durante la jornada electoral, dando peso político a la misión, pero por el momento la cámara europea está lejos de un consenso sobre la cuestión.
De hecho, hasta ahora el Partido Popular Europeo y los liberales de Renew han criticado duramente cualquier acercamiento a Caracas, por lo que la misión corre un riesgo muy serio de no contar con eurodiputados, lo que sería una desautorización muy seria de la política de Borrell.