El mundo continúa sobrecogido por las imágenes de los cadáveres de civiles asesinados por tropas rusas y abandonados en la calle en Bucha, un suburbio al norte de Kiev. El alcalde de la capital, Vitali Kitschko, visitó la zona junto a varios periodistas e instó a la prensa a contar el horror cometido por el ejército ruso: "Los hombres tienen las manos atadas a la espalda, estaban indefensos. Los soldados rusos han hecho un safari con los civiles. Hemos visto sólo aquí 300 cadáveres. ¿Qué razón puede haber para matar así civiles? Es un genocidio de ucranianos", dijo este domingo antes de afirmar que el alcalde del municipio le había contado que también encontraron una mujer embarazada asesinada en su coche junto a sus hijos".
Su hermano Vladimir también señaló a los medios desde Bucha que es una clara "ejecución de civiles" y avisó de que "no ha pasado nunca en Bucha sino en toda Ucrania. "Aún nos queda mucho por ver, esto ha pasado también en Mariúpol, en el sur del país". "La muerte está en todas partes por donde pasan los hombres enviados por Putin", señaló.
"Algunos estaban tirados en la acera, otros al lado de un coche o de una bicicleta" denunció en un vídeo difundido por Facebook el alcalde de Bucha, Anatoly Fedoruk, quien afirmó que 280 cadáveres habían sido enterrados ya en una fosa común ante la imposibilidad de usar el cementerio municipal.
Por su parte, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, calificó lo ocurrido como "genocidio" y el jefe de la diplomacia ucraniana, Dmytro Kuleba, urgió el envío de una misión de la Corte Penal Internacional a Bucha, para investigar esta masacre. "La masacre de Bucha fue deliberada. Los rusos quieren eliminar a tantos ucranianos como puedan," afirmó en Twitter, y llamó a la comunidad internacional a imponer "sanciones devastadoras contra Moscú".
Mientras, en todo el mundo se han sucedido las condenas por las atroces imágenes de Bucha. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo este domingo que las imágenes son un "puñetazo en el estómago", aunque la Inteligencia estadounidense ya había alertado anteriormente de que era "muy probable" que las Fuerzas Armadas rusas fueran a cometer "atrocidades".
"No podemos volvernos insensibles a cosas así. No podemos normalizarlo. Esto es la realidad de lo que está ocurriendo cada día", aseguró el secretario de Estado.
La organización de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) afirmó tener indicios de que el Ejército ruso está cometiendo posibles crímenes de guerra en las áreas bajo su control, entre ellos ejecuciones sumarias de civiles.
Rusia, mientras, desmintió las acusaciones y afirmó que "todas las fotos y videos publicados por el régimen de Kiev, que supuestamente dan testimonio de algún tipo de crimen por parte del personal militar ruso, son otra provocación".