Gran Bretaña y el mundo entero miran a Balmoral, la residencia veraniega de la reina Isabel II, donde acaba de producirse la noticia de que ha llegado a su final la larga e intensa vida de la monarca, que ha reinado durante más de 70 años y que ya tiene 96 años.
Es el adiós a todo un símbolo, seguramente el último gran personaje del siglo XX. Y también es, por supuesto, un gran cambio institucional en el Reino Unido. Un cambio y una serie de ceremonias que, obviamente, no se pueden improvisar.
De hecho, hay un gran plan previsto conocido como "Operación Puente de Londres" que, pese a ser secreto fue desvelado en buena parte por el diario Político hace sólo un año, cuando el periódico del conglomerado de medios Axel Springer aseguró tener una serie de documentos que desvelan el gran despliegue a todos los niveles que hará el país en los diez días que pasarán entre la muerte de la reina y el funeral que se celebrará en la Abadía de Westminster.
En el primer momento: el "Día D"
Tras el fallecimiento de Isabel II se han de producir una serie de "llamadas en cascada" con las que se avisará a la primera ministra – con la que la reina mantuvo su última reunión oficial el pasado martes – y los más altos funcionarios del Estado.
Un detalle curioso es que está previsto que la llamada al primer ministro consiste en único breve y críptico mensaje: "El Puente de Londres ha caído". Los ministros y otros altos funcionarios, por el contrario, van a recibir –probablemente habrán recibido ya– n correo con un texto sencillo pero menos rebuscado: "Queridos colegas, os escribo con tristeza para informaros de la muerte de Su Majestad la Reina".
A partir de ahí las banderas en muchos edificios oficiales van a ondear a media asta en menos de 10 minutos, algo que, según uno de los documentos desvelados por Político preocupaba en su día en Downing Street, donde no contaban con un funcionario capaz de hacerlo y que estuviese a todas horas en la residencia oficial del primer ministro. Tanto el parlamento británico como los de Escocia, Gales o Irlanda del Norte aplazarán sus sesiones si en estos momentos están en funcionamiento y se anularán las que pudiera haber convocadad.
Mensajes en redes sociales y del rey Carlos
Parte de los planes previstos afectan, como no podía ser de otra manera a redes sociales y a páginas web: la de la familia real se ha convertido en una página en negro con un mensaje corto, la del gobierno tiene también una gran banda negra.
La primer ministro, la recién nombrada Liz Truss, será la encarga de hacer una declaración pública inicial, mientras que los miembros de su gabinete tendrán que esperar a esta primera intervención para hablar ellos. Habrá salvas de artillería y un minuto de silencio en todo el Reino Unido.
Estaba previsto que el príncipe Carlos, que en este momento ya es Rey, lanzase un mensaje a la nación la misma tarde de este "día D", después de reunirse con la primer ministro, pero dada la hora a la que se ha hecho pública la noticia habrá que ver si es posible.
Día D+1, D+2...
Los días posteriores al fallecimiento se denominan Día D+1, +2, +3… hasta el Día D+10, en el que se celebrará el funeral de estado. En el inmediatamente posterior al fallecimiento, es decir, este viernes, el llamado Consejo de Adhesión –compuesto por los miembros más relevantes del Gobierno y otras cargos públicos– se reunirá con el rey Carlos en el Palacio de Saint James y lo proclamarán nuevo soberano.
Tras esto, pero en ningún caso antes, el Parlamento se reunirá para aprobar un mensaje de pésame, aparcando sus sesiones habituales durante los próximos diez días. El gobierno y el primer ministro también mantendrán una audiencia con el recién proclamado soberano.
En el Día D+2 estaba previsto el traslado del féretro si la reina fallece, como ha sido, fuera de Buckingham Palace. Pero al producirse la muerte en Balmoral se lanzará otra operación, en este caso la Unicornio, que comprende todos los aspectos de seguridad necesarios en Escocia y que el ataúd de la reina repose durante 24 horas en la catedral de St. Gilles de Ediburgo. Tras eso el cuerpo de Isabel II llegará a Londres, en principio en el Tren Real. De no ser esto posible sería puesta en marcha una tercera operación la Sobreestudio, que supondrá que ese traslado se haga en avión.
En el tercero, es decir, el próximo domingo, día el Rey iniciará un viaje por el Reino Unido que le llevará a visitar también la Catedral de Edimburgo y el Parlamento Escocés y, ya en el Día D+4, a Irlanda del Norte. Dos días después, estamos hablando del miércoles, el féretro se llevará desde Buckingham hasta el parlamento en Westminster. Allí y durante los tres días posteriores -es decir, de jueves a sábado, estará expuesto al público 23 horas al día, todo un reto de seguridad para el que se lanzará otra operación, en este caso denominada Pluma.
El funeral
Mientras el féretro está expuesto al público el rey Carlos viajará a Gales y se desarrollará un ensayo general del funeral de estado, que tendrá lugar el Día D+10, es decir, el próximo domingo en la Abadía de Westminster, con procesiones en Londres y en Windsor, donde Isabel II será enterrada en la capilla el Rey Jorge del castillo.