La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE) pidió este jueves al Ejército que retire su apoyo al presidente Lenín Moreno, que afronta desde hace una semana protestas contra la eliminación del subsidio a los combustibles, lo que ha degenerado en una crisis social y en la aplicación del estado de excepción.
En una concentración en la Casa de la Cultura de Quito, donde se reunieron miles de indígenas, Jaime Vargas, presidente de la CONAIE, también calificó de "traidores" a aquellos líderes aborígenes que están hablando con el Gobierno. Además, aseguró que no representan al colectivo y sus decisiones no desmovilizarán la protesta.
Secuestro de policías
En la concentración de este jueves, los indígenas mantuvieron retenidos a ocho policías, entre ellos a una mujer, y exigen que las fuerzas del orden suspendan la represión de la comunidad.
También advirtieron de que aplicarán sobre ellos la justicia ancestral si las fuerzas del orden atacan esa sede. "Afuera nos dicen que el Gobierno empieza a mandar ya las bombas lacrimógenas, entonces ahora nuestros líderes indígenas no les van a soltar a los policías porque necesitamos un respeto. Si ellos nos agreden, nosotros vamos a aplicar la justicia indígena", dijo Fabián Masabanda, indígena de la provincia de Imbabura. "No nos responsabilizamos de la vida de los policías", advirtió.
De acuerdo a Masabanda, retuvieron a los policías "porque empezaron a agredir". "Nosotros venimos en son de paz, pero el Gobierno nos ha maltratado cruelmente", aseguró, al denunciar que el miércoles la policía "atacó con bombas lacrimógenas" una zona de la universidad donde pernoctan desde que llegaron a Quito en el marco de las protestas que estallaron hace una semana por la eliminación del subsidio de los combustibles.
Llaman a "radicalizar" la protesta
Además, la CONAIE instó este jueves a sus seguidores a "radicalizar" las protestas y subrayaron que "no para hasta que el FMI salga de Ecuador". "A radicalizar acciones", ha dicho en un comunicado, llamando a "ir a la lucha, renovar fuerzas y sostener los bloqueos de vías y las tomas de gobernaciones y edificios públicos" y a hacer "asambleas en todas las comunidades y alianzas con todos los sectores del pueblo".
La CONAIE consideró que "el diálogo que plantea Lenín Moreno es una fantochada", insistiendo en que solo se sentará a la mesa de negociaciones si el Gobierno recupera las subvenciones al combustible y cesa a los ministros de Interior y Defensa, María Paula Romo y Oswaldo Jarrín, respectivamente. "Nada de diálogo con un Gobierno asesino hasta que se cumplan los mínimos requisitos", indicó.