Después de encontrar en la víspera los primeros restos materiales de la aeronave, el general de la FACh, Arturo Merino, confirmó que la búsqueda llevó a dar también con restos humanos, a los que todavía es necesario realizar peritajes forenses para confirmar que se trata de los pasajeros.
Sin embargo, "las condiciones" en las que se han hallado los restos humanos en el mar de Drake, entre el Cabo de Hornos y el continente helado y cuyas aguas están consideradas unas de las más turbulentas del planeta, llevaron a las autoridades a concluir que es "prácticamente imposible que existan sobrevivientes a este accidente aéreo", agregó Merino. "Junto a las partes del avión que se siguen encontrando hasta ahora se han hallado restos de seres humanos, los que muy probablemente sean partes de quienes viajan en el avión C-130 siniestrado", afirmó Merino.
En ese sentido, destacó que, si se siguen encontrando restos, materiales o humanos, la búsqueda seguirá extendiéndose, a pesar de que el plazo regulado es de seis días ampliable a un total de 10.
Los primeros restos de la aeronave los encontró este miércoles el buque Almirante Maximiano de la Armada de Brasil, que ayuda en las tareas, y desde ese momento el rastreo se concentró en esa zona, donde se hallaron el resto de las evidencias del accidente.
Desde la FACh informaron de que la zona donde se está buscando actualmente en el Paso de Drake es un área de 4.000 metros de profundidad y ya se han conseguido recuperar elementos del avión, como una rueda del tren de aterrizaje, elementos del sistema de combustible o materiales del interior del aparato, un Hércules C-130.
"Se han dispuesto 23 medio aéreos, entre aviones y helicópteros, 14 medios navales y 8 agencias internacionales con capacidades satelitales, que han permitido finalmente ubicar al avión", indicó el ministro de Defensa, Alberto Espina, quien se desplazó este jueves a la urbe austral de Punta Arenas, a unos 3.000 kilómetros al sur de Santiago. Entre los enseres personales encontrados hay dos bolsos, una mochila y un zapato.
El Hércules C-130 despegó el lunes a las 16:55 hora local de la base militar de Chabunco, en Punta Arenas, y perdió el contacto cuando le quedaban cerca de una hora y 500 kilómetros para aterrizar en la base Presidente Eduardo Frei Montalva, una de las más importantes del continente helado. El avión, que tenía combustible para mantenerse en el aire hasta las 00:40 hora local, trasladaba personal que iba a hacer tareas de mantenimiento en la base, entre ellas un tratamiento anticorrosivo de sus instalaciones, además de revisar el oleoducto flotante que abastece de combustible a la zona.