"Nos negamos a la pretensión de los usurpadores de Miraflores de construir una oposición a su conveniencia, esa es otra de las razones por las que hemos decidido dar un paso al frente, cuando al parecer nadie más está dispuesto a asumir el riesgo", dijo Henrique Capriles en un comunicado difundido la noche de este domingo. "Hay que impedir que se cierren todas las puertas, que terminen con las posibilidades de buscar un nuevo escenario político para ese cambio que todos queremos", añadió.
El pasado miércoles, Capriles se desmarcó del llamamiento a boicot a las legislativas que hiciera el jefe del Parlamento y presidente interino Juan Guaidó, y pidió aprovechar la "rendijita" de oportunidad que abren las elecciones para presionar a Maduro en el plano político. "Esta es la posición que hemos decidido tomar. Y lo hacemos con pleno entendimiento de sus consecuencias y del peso político de lo que algo así implica", dijo al respecto este domingo. "Eso sí: la invitación a cada una de las fuerzas democráticas del país sigue abierta, para abrir caminos de lucha donde hoy no existe ninguno", prosiguió.
Palabras a los venezolanos #6Sep pic.twitter.com/Pn4x6wJibg
— Henrique Capriles R. (@hcapriles) September 6, 2020
Capriles también señaló que quedarse de brazos cruzados, en alusión al llamado a abstención propuesto por Guaidó y respaldado por 27 partidos opositores, "solo será conveniente" para Maduro, un líder que, consideró, "usurpa" el poder.
Sobre Capriles, dos veces candidato a la presidencia y exgobernador del céntrico estado de Miranda, pesa una inhabilitación de 15 años para ejercer cargos públicos, impuesta en abril de 2017 bajo acusaciones de "ilícitos administrativos".
Aunque su partido, Primero Justicia, dijo el viernes que no se presentará a las legislativas, se desconoce si Capriles liderará a una nueva organización con la que se le vincula, y que ya fue usada por varios opositores para acudir a comicios cuando la estrategia de los detractores de Maduro fue la abstención.