En la jornada de este miércoles, el régimen de Daniel Ortega reforzó su presión contra los miembros de la oposición nicaragüense y se concentró especialmente en Cristiana Chamorro, principal figura opositora con mayor probabilidad de ganar las elecciones de noviembre.
De esta manera, los mecanismos de la dictadura se activaron para asaltar violentamente el domicilio de Chamorro tras lograr una inmediata orden de detención firmada por una jueza afín al régimen. Según el diario La Prensa, la jueza Karen Chavarría Morales es conocida por su lealtad por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y también participa como "coordinadora de los comités de los Liderazgos Sandinistas en el Poder Judicial".
Tras varias horas en las que los medios de comunicación denunciaron la falta de información sobre el paradero de la opositora, el periodista Carlos Fernando Chamorro, director del diario Confidencial, informó a través de su cuenta de Twitter que su hermana había quedado bajo arresto domiciliario.
Este jueves, la información sobre el estado de Chamarro es nula por su situación de total aislamiento, mientras miembros de seguridad de la dictadura se mantienen en el domicilio y en los alrededores de su casa.
Inhabilitación de facto
Lo que está claro es que el proceso contra Chamorro no ha seguido los adecuados caminos judiciales y su situación ha sido ordenada desde el propio régimen. Es así que al asalto a la vivienda y la detención arbitraria de la opositora le siguió una inhabilitación en su carrera a la presidencia, una situación que incomodaba a Daniel Ortega ante sus altas posibilidades de ser derrotado. De hecho, hace apenas dos días, Chamorro solicitó a la opositora Alianza Ciudadanos por la Libertad (CxL) su inclusión como precandidata para las elecciones del 7 de noviembre.
El fallo judicial del Juzgado Quinto de Distrito de lo Penal de Audiencias Circunscripción de Managua señala que "se inhabilita a la ciudadana Cristiana María Chamorro Barrios para ejercer cargos institucionales y públicos por no estar en pleno goce de sus derechos civiles y políticos, por encontrarse en un proceso penal investigativo". De esta manera, la justicia dirigida por Ortega responde a una solicitud de la Fiscalía, que dirige la exsandinista Ana Julia Guido.
Reacción de EEUU
Una de las primeras reacciones de EEUU ha sido la del secretario de Estado, Antony Blinken, quien en una entrevista con el diario argentino La Nación señaló que "en la Organización de Estados Americanos (OEA) se llamó a Nicaragua a tomar los pasos necesarios para tener elecciones libres y justas, y en vez de hacer eso, en vez de cumplir con sus responsabilidades, incluidas las responsabilidades con las que se comprometieron al firmar la Carta Interamericana hace 20 años, se está moviendo en la dirección contraria".
Agregó que "negar la oportunidad a diferentes personas de participar en las elecciones, reducir el espacio para tener elecciones libres y seguras, reducir el espacio para que se escuchen las diferentes voces, eso va en una dirección equivocada".