Los ecuatorianos se preparan para celebrar este domingo la primera vuelta de unas elecciones presidenciales que buscarán al sucesor del actual presidente Guillermo Lasso, medio de un ambiente marcado por la violencia de las bandas criminales y del miedo de la población por posibles atentados durante la jornada electoral.
Gran parte de la atención se centra en las medidas de seguridad que el gobierno prepara para que los 13,4 millones de electores ecuatorianos puedan acudir de manera tranquila a los colegios electorales.
El asesinato de Fernando Villavicencio el miércoles 9 de agosto ha dejado claro que la principal preocupación de los ecuatorianos es la inseguridad y la necesidad de buscar a un nuevo presidente que encuentre las estrategias adecuadas para luchar contra el crimen organizado y el sicariato que tantas veces denunció Villavicencio en sus mítines de campaña.
El reto para el sucesor de Lasso es enorme ya que las bandas criminales han sido protagonistas de una campaña que ha dejado varios ataques a diferentes candidatos. De hecho, el pasado jueves, un tiroteo sin víctimas se registró durante uno de los actos de cierre de campaña del candidato Daniel Noboa, un hecho calificado de atentado por su equipo de campaña, pese a que el Gobierno descartó que fuera un ataque contra el candidato.
🔵 ATENCIÓN | En cumplimiento del Plan de #SeguridadElectoralEc establecido entre el CNE, @FFAAECUADOR y @MinInteriorEc, informamos que los recintos electorales se encuentran custodiados 🪖 con miras a la jornada de sufragio que vivirá el país este domingo #20A. 🇪🇨🗳️ pic.twitter.com/cK37xbupSQ
— cnegobec (@cnegobec) August 18, 2023
La jornada electoral se llevará a cabo en pleno estado de excepción decretado por el Gobierno durante 60 días en todo el país, con un despliegue de las Fuerzas Armadas que apoyarán a unos 60.000 policías a mantener el orden interno.