El Gobierno de Pedro Sánchez ha rechazado sumarse a los casi cincuenta países democráticos que han exigido a Putin que libere al periodista de The Wall Street Journal Evan Gershkovich, encarcelado en Moscú por supuesto espionaje desde hace varias semanas, según informa Ignacio Cembrero, colaborador de esRadio, en El Confidencial.
La petición, organizada por la embajada de EEUU ante la ONU, cuenta con la rúbrica de 48 países, entre los que se encuentran todos los países miembros de la UE, salvo dos excepciones: España y Hungría. Junto con Turquía, los Estados mencionados son los únicos miembros de la OTAN que tampoco han suscrito el texto. Tampoco lo ha hecho ningún país de América Latina.
El Confidencial ha contactado con la Oficina de Información Diplomática para preguntar por qué la diplomacia española y el embajador de Estaña ante la ONU, Agustín Santos, no han secundado este llamamiento contra la libertad de prensa. El organismo ha solicitado más tiempo para poder dar una explicación. Por su parte, tal y como apunta Cembrero, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, estuvo todo el lunes de viaje en Estrasburgo.
Como era de esperar, que España no haya firmado el citado manifiesto ha desatado algunas especulaciones en los pasillos de la ONU. En las conversaciones, se ha evocado un hipotético deseo de la diplomacia española de abrir un discreto canal de comunicación con Rusia, mientras que otros comentarios apuntaban a que no se ha querido suscribir un documento sobre la libertad de prensa junto con Polonia, que mantiene encarcelado desde hace casi 14 meses al periodista español Pablo González, también acusado de espionaje, pero esta vez por cuenta de Rusia.
Cabe recordar que los ministros podemitas del Gobierno de España han exigido, en no pocas ocasiones, que España no adoptara una actitud tan beligerante contra la tiranía de Putin.