El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación se mantiene en contacto con las embajadas en países árabes donde han surgido protestas por el vídeo en el que se ridiculiza a Mahoma, sin que por ahora se hayan registrado incidentes en torno a sus instalaciones.
Exteriores y las embajadas de estos países "están evaluando los riesgos en cada sitio por si fuera necesario adoptar medidas", han señalado a Efe fuentes de la Oficina de Información Diplomática.
Las protestas se han extendido este viernes a Sudán, donde decenas de manifestantes han irrumpido en las embajadas de Alemania y el Reino Unido. En ambas legaciones, que se encuentran en la misma zona en el centro de la capital sudanesa, los manifestantes accedieron tras escalar los muros que las rodean y se quedaron en la parte exterior del recinto sin entrar en los edificios.
También ha habido enfrentamientos entre los manifestantes y la policía junto a la embajada de Estados Unidos en Jartum, la capital sudanesa, que han provocado al menos tres muertos. Las protestas surgieron esta semana en repulsa por el vídeo considerado blasfemo por los musulmanes en el que se hace una sátira del profeta Mahoma, cuya autoría se desconoce por el momento.
También hay denuncias de que algunas revistas germanas han publicado unas caricaturas sobre la principal figura del islam en las últimas semanas.
Los ataques de hoy suceden a los registrados en los últimos días en Yemen, Egipto y Libia, en el que falleció el embajador estadounidense, Christopher Stevens, y tres empleados del consulado en Bengasi, al este del país.
España cuenta con embajadas en estos tres países y en Sudán, así como en Túnez, donde también ha habido incidentes. El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, hizo un llamamiento ayer para que los ciudadanos españoles que vayan a desplazarse a algún país de la zona lean con atención las recomendaciones de viaje.
Por el momento, la única actualización que Exteriores ha hecho en su página web se refiere a Libia. Este departamento desaconseja viajar "bajo cualquier circunstancia" a la mayor parte del país, incluidas las ciudades de Bengasi y Sirte. Para el caso de Trípoli y alrededores, también se pide evitar viajar "salvo en casos de extrema necesidad".