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Cuatro hijas del rey de Arabia Saudí, en cautiverio desde hace 13 años

Su madre, que huyó a Londres después de que Abdulá se divorciara de ella denuncia que las están "matando de hambre".

Su madre, que huyó a Londres después de que Abdulá se divorciara de ella denuncia que las están "matando de hambre".
Abdulá, el rey de Arabia Saudí | Wikipedia

Cuatro hijas del rey Abdulá de Arabia Saudí llevan 13 años viviendo bajo arresto domiciliario en un palacio ruinoso sin comida, agua y electricidad.

Según informa LOC de El Mundo, su madre, Alanoud al Fayez, huyó a Londres después de que el monarca se divorciara de ella. La mujer no pudo llevarse a sus hijas y, desde entonces, mantiene una lucha silenciosa para conseguir su liberación.

Así, Sahar, de 42 años, y Jawaher, de 38, están encerradas en un ala del complejo real de Al Murjan, un barrio de clase alta del norte de Yeda; las otras dos, Maha, de 41 años, y Hala, de 39, están separadas en otra parte del palacio. Estas últimas son las que se encuentran en peores condiciones de salud. Tienen estrictamente prohibido recibir visitas, aunque se trate de un médico.

La madre declara al suplemento de Unidad Editorial que Abdulá las está "matando de hambre". La electricidad y el agua corriente sufren cortes a discreción y no hay aire acondicionado en un país donde las temperaturas pueden alcanzar en verano los 50 grados. Las cuatro hermanas son sometidas a torturas psicológicas y físicas por parte de sus propios familiares, según contaron las propias Sahar y Jawaher, quienes tienen acceso a Skype y a Twitter pese a su aislamiento.

La historia de al Fayez

Al Fayez es hija de una prominente familia jordana de origen saudí. La primera vez que vio a Abdulá, entonces príncipe, ella tenía 15 años -él, 48. Fue en 1972 cuando su familia le contó que iba a ser dada en matrimonio a aquel tipo, según su relato. No tardó en quedarse embarazada de su primera hija. La vida en palacio era lujosa, pero monótona. El monarca tenía otras esposas que atender y los años pasaron para Al Fayez sin preocupaciones. Transcurrieron cuatro años y Al Fayez dio a luz a cuatro hijas. Para el rey, eso fue inaceptable: ella era incapaz de producir un varón y, por ello, la repudió.

Finalmente, Abdulá se divorció de ella, aunque Al Fayez no se enteró hasta años después. En Arabia Saudí, el marido puede divorciarse de su esposa cuando quiera y sin el conocimiento de esta.

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