Las autoridades de Israel han acusado al director de operaciones en Gaza de la organización cristiana World Vision, Mohamed el Halabi, de haber desviado millones de dólares a Hamás, algo que la organización terrorista palestina ha negado y sobre lo que la ONG ha mostrado su escepticismo, si bien realizarán una investigación.
El Halabi fue arrestado por las autoridades israelíes el pasado 15 de julio al cruzar la frontera de la Franja de Gaza, donde gobierna Hamás, una organización que figura en las listas de grupos terroristas de Estados Unidos, Israel y la UE.
Según informa Europa Press, los responsables de World Vision han declarado este jueves que se sienten "conmocionados" por las acusaciones de Israel y han asegurado que llevarán a cabo varias evaluaciones para asegurarse de que la ayuda llega a los destinatarios deseados.
"Basándonos en la información disponible hasta el momento, no tenemos ninguna razón para creer que las alegaciones son ciertas. Revisaremos las pruebas cuidadosamente y tomaremos las medidas adecuadas basándonos en esas pruebas", ha informado la ONG a través de un comunicado.
Más de seis millones de euros
El Halabi es palestino y director de World Vision en Gaza desde 2010. Un portavoz de las fuerzas de seguridad israelíes ha declarado que El Halabi ha estado sometido a vigilancia y que ha confesado haber desviado 7,2 millones de dólares -unos 6,4 millones de euros- para pagar a los milicianos de Hamás y comprar armas, así como para financiar operaciones y construir fortificaciones.
"El dinero se ha usado para financiar a Hamás y pagar a grupos armados. Los paquetes de ayuda con comida y botiquines dirigidos a los residentes de Gaza también fueron entregados a Hamás y sus milicianos en vez de a sus destinatarios, los pobres de Gaza", ha asegurado el portavoz.
Además, ha añadido que parte de los fondos fueron destinados a comprar armas para los insurgentes en la península del Sinaí y que la base militar de Hamás fue construida con 80.000 dólares (71.000 euros) del dinero de World Vision.
Por su parte ha asegurado que la organización terrorista "no tiene ninguna relación con Halabi y que las acusaciones israelíes son nulas".