Segundo día consecutivo de milagros en Turquía. Efectivos de la Infantería de Marina española han conseguido rescatar durante la madrugada de este sábado a un niño de 7 años que llevaba enterrado bajo los escombros desde que un terremoto de 7,8 grados Richter asoló en sur del país otomano y el norte de Siria la madrugada del lunes. Cinco días completos sin acceso a comida o agua.
Los hechos han tenido lugar en Iskenderun, también conocida como Alejandreta, una de las ciudades asignadas a los militares del grupo de combate Dédalo de la Armada. Según ha explicado el teniente de infantería de Marina Manuel González Baiges, "la situación era un poco caótica, ya que era el quinto día y las posibilidades de encontrar a alguien con vida disminuyen drásticamente. Sin embargo, esto cambió cuando tras uno de los silencios que se hacían en búsqueda de algún indicio de vida".
"Tras la pregunta rutinaria de los equipos de rescate turcos ‘somos el equipo de rescate, si alguien me oye que grite o de tres toques a su alrededor’, se escuchó un ruido. Se despejaron las grietas para poder acceder al interior. Tardaron unos 20 minutos en llegar hasta esa pequeña vida que devolvió un hilo de esperanza a todos los que nos encontrábamos en el lugar", continúa González Baiges.
Éste es el segundo rescate que protagonizan militares españoles en suelo turco, después de que los efectivos de la Unidad Militares de Emergencias (UME) rescataran ayer viernes a una mujer y a sus dos hijos pequeños entre las ruinas en la localidad de Nurdagi.
La ayuda militar española en Turquía está conformada por una cincuentena de efectivos de la UME, que han ido acompañados por cinco perros adiestrados, además de los miembros del grupo de combate Dédalo de la Armada, que navegaba por el Mediterráneo en misión de seguridad marítima y que fue desviado al sur de Turquía para colaborar con las autoridades turcas. Finalmente llegaron durante el miércoles a la Península de Anatolia.
Este grupo aeronaval se ha articulado en torno al portaaeronaves L-61 Juan Carlos I, que lleva una unidad aérea embarcada compuesta por una docena de cazas Harrier AV8B+ y varios helicópteros. También forman parte del mismo el buque de asalto anfibio L-51 Galicia, la fragata F-103 Blas de Lezo y el buque de aprovisionamiento de combate A-15 Cantabria. A bordo llevan un Batallón Reforzado de Desembarco de Infantería de Marina.