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Madrid

Almeida quiere dejar de ser portavoz del PP y no acude a la reunión en Génova

Almeida quiere centrarse en su labor como alcalde, pero "no hará nada que no esté consensuado con la dirección nacional" del PP.

Almeida quiere centrarse en su labor como alcalde, pero "no hará nada que no esté consensuado con la dirección nacional" del PP.
José Luis Martínez Almeida el pasado jueves en Cibeles. | Ayuntamiento de Madrid

José Luis Martínez-Almeida quiere dejar la portavocía nacional del PP para centrarse únicamente en su labor como alcalde de Madrid, pero "no hará nada que no esté consensuado con la dirección nacional del partido", matizan a Libertad Digital fuentes de su entorno.

Todo ello sucede en medio de la crisis más honda que ha vivido el PP, desencadenada después de que saliera a la luz pública que la actual dirección del partido habría ordenado espiar a la presidenta de la Comunidad de Madrid. Así, cobraba una especial relevancia la reunión habitual de los lunes del Comité de Dirección que se ha celebrado en Génova. Pero Almeida no ha acudido. Desde su entorno explican que ha tenido un encuentro con el embajador de Chile y que "mañana el alcalde tiene un pleno muy importante en el Ayuntamiento de Madrid y está preparándolo", informa Míriam Muro.

Esta decisión que ha tomado Martínez-Almeida cuenta con el visto bueno de su vicealcaldesa. "El primer día que asumió esta labor, le aconsejé, a nivel personal, que no la aceptase. Yo no lo habría hecho", dijo Begoña Villacís a preguntas de los medios. "Hay momentos que tienes que elegir: si optas por tu partido u optas por la institución".

"Y en este momento los intereses son contrapuestos: en este momento defender al Partido Popular no es defender la institución del Ayuntamiento de Madrid", por lo que Almeida "debería dejar" la portavocía, opinó.

Desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid también se alegran. Su portavoz y consejero de Educación, Enrique Ossorio, espera que deje de serlo. Así lo manifestó este lunes en una entrevista concedida a Onda Madrid. "Lo está haciendo muy bien" como alcalde, pero tiene un "papel incómodo".

"Cuando desde la dirección nacional le pidieron que fuera portavoz, todos los ciudadanos percibimos un cambio. Yo creo que en la cara se le ha notado que en las últimas semanas se sentía incómodo", dijo Ossorio.

Almeida se borra como portavoz

De todos los protagonistas en esta crisis sin precedentes que ha reventado las costuras del PP, Almeida fue el primero en comparecer ante la prensa el pasado jueves a las nueve de la mañana. Lo hizo para dar cuenta de la posible vinculación del Ayuntamiento, a través de la Empresa Municipal de la Vivienda, con el espionaje a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Y lo hizo en calidad de regidor. No aceptó preguntas como portavoz nacional.

Desde entonces Martínez-Almeida guarda silencio. No habló tras la dimisión de Ángel Carromero, uno de los fontaneros de Génova implicado en este espionaje ordenado por la dirección y coordinador general de la Alcaldía hasta el jueves. Tampoco se ha vuelto a pronunciar en Twitter, donde el alcalde es muy activo.

Martínez-Almeida tenía intención de dejar este puesto, que le obliga a tener un doble papel -institucional y de partido- desde hace tiempo, algo que recurrentemente aprovechaba la oposición para recriminarle que no estuviera centrado única y exclusivamente en solucionar los problemas de la capital.

Fue nombrado portavoz nacional del PP en agosto de 2020, cuando Pablo Casado renovó su dirección para destituir como portavoz de los populares en el Congreso a Cayetana Álvarez de Toledo. Desde ese momento comenzaron los problemas para el alcalde, que hasta entonces había cosechado enorme popularidad por despuntar como líder de la oposición al gobierno de Manuela Carmena, primero, y por su gestión de la pandemia después .

Pero fue sobre todo a partir de septiembre cuando la situación comenzó a volverse insostenible: el 7 de ese mes, el presidente del PP, durante un desayuno informativo y ante la presencia de Ayuso, le metió en la terna por presidir el partido regional. A partir de ese momento, desde Génova deslizaban su nombre: era el candidato que la dirección quería para competir en un congreso contra Isabel Díaz Ayuso. Almeida nunca se descartó del todo, pero nunca señaló su preferencia por concurrir al cónclave. Cuando se acercara la fecha – que la dirección retrasaba- y se convocara, decidiría, afirmaba.

En su demoledora comparecencia del pasado jueves, Ayuso tuvo palabras también para él. "Yo he actuado con absoluta lealtad con el alcalde y además me creo sus palabras, porque en este tiempo los dos no hemos hecho otra cosa que trabajar juntos desde las dos administraciones, desde la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. Me cuesta creer que hayamos luchado tanto para meternos ahora en movimientos absurdos como éste, más propio de personas que no saben lo que es gestionar una administración y andan de pasillo en pasillo sin responsabilidad alguna".

Desde entonces, Almeida guarda silencio. En el horizonte, las elecciones municipales de 2023.

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