El Ministerio del Interior ha actualizado el Balance de la Criminalidad de nuestro país con los datos facilitados por las Fuerzas de Seguridad y policías autonómicas, forales y locales. De este modo, se puede hacer la radiografía completa de los primeros seis meses del año, donde los delitos se han multiplicado por todo el país tras el desplome de los mismos que provocó la pandemia y que todavía afectó a la estadística de 2021.
En el caso de la Comunidad de Madrid, todos los municipios con una población de más de 20.000 habitantes –que son los que aparecen desglosados en las estadísticas del departamento que dirige Fernando Grande Marlaska– tienen un importante aumento de la delincuencia respecto a los primeros seis meses del año pasado, con incrementos de hasta casi un 50 por ciento. La subida media autonómica es del 24,6 por ciento.
Todos, menos uno. La excepción a este aumento de delitos, que deja las cifras en datos muy similares a los del primer semestre de 2019, cuando los estragos que ha causado la pandemia de coronavirus parecían algo imposible, ha sido Galapagar, localidad ubicada en la sierra noroeste de Madrid y que cuenta con 35.000 habitantes. Allí los delitos bajaron un 4,7 por ciento respecto al mismo periodo de 2021.
Demarcación correspondiente a la Guardia Civil, fue la localidad elegida por el que fuera líder de Podemos y exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, y por su pareja, la ministra de Igualdad, Irene Montero, para comprarse un chalet de lujo de aproximadamente unos 600.000 euros, con jardín y piscina privada, para poder crear allí su propia familia.
Una decisión que tomaron pese a que el propio fundador de Podemos había dicho al inicio de su entrada en política que él seguiría viviendo siempre en el barrio madrileño de Vallecas y que desde una vivienda de lujo –lo dijo tras el cambio de casa del exministro de Economía e Industria, Luis de Guindos (PP)– no se puede estar al tanto de las necesidades de la población más desfavorecida, a la que su partido dice que defiende.
Las localidades madrileñas donde más se han incrementado los delitos han sido, por este orden, Arganda del Rey (43,3%), Navalcarnero (38,9%), Aranjuez (37,4%), Collado Villaba (28,7%), Madrid capital (28,5%), Coslada (27,7%), Boadilla del Monte (27%), Valdemoro (26,3%), Algete (26%), Pinto (25,9%), Alcorcón (25,6), Villanueva de la Cañada (24,8%) y Alcobendas (24,6%).
Las subidas por debajo de la media regional se encuentran Torrejón de Ardoz (21,7%), Leganés (20%), Paracuellos de Jarama (19,8%), Rivas Vaciamadrid (19%), Majadahonda (16,8%), Alcalá de Henares (16,3%), Parla (16%), Villaviciosa de Odón (15,9%), Pozuelo de Alarcón (14,4%), Getafe (13,8%), Móstoles (13,2%), Tres Cantos (12%), Colmenar Viejo (9,5%), Las Rozas (9,2%), Arroyomolinos (8,7%), Torrelodones (8,5%), San Fernando de Henares (7,2%), San Sebastián de los Reyes (3,6%), Mejorada del Campo (3,4%), Fuenlabrada (1,7%) y Ciempozuelos (0,5%).