Las relaciones, siempre tensas, entre la Puerta del Sol y la Moncloa atraviesan ahora su peor momento. Un choque sin precedentes que se traduce ahora en un nuevo gesto más que no hace sino aumentar esa escalada. La Delegación del Gobierno ha informado que este año celebrará su propio acto institucional por el Día de la Constitución en vez de sumarse, como es tradición, al que se organiza desde la Real Casa de Correos.
En un comunicado el delegado del Gobierno en Madrid y exsecretario general de Presidencia, Francisco Martín, denuncia que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, le "impide" que tome la palabra durante este evento que, según ha recordado, ambas administraciones tenían la tradición de organizarlo conjuntamente hasta el año pasado.
Ante esta situación, dice Martín, la Delegación ha decidido organizar el suyo propio para el 4 de diciembre en la Galería de Colecciones Reales, donde se conmemorará el 46º aniversario de la Constitución y al que ha invitado a todas las instituciones madrileñas. La decisión se ha tomado después de que el Gobierno de la Comunidad de Madrid "haya mostrado su intención de ir un paso más allá en su estrategia de confrontación" con el Ejecutivo central, impidiendo que el delegado "tome la palabra en un acto que, hasta el pasado año, se organizaba conjuntamente entre las dos administraciones", lamenta.
En declaraciones remitidas a los medios, Martín ha subrayado que es el momento en el que las instituciones tienen que estar centradas "en enviar mensajes de unidad a la ciudadanía". La presienta "este año ha decidido incluso dar un paso más, que es el de silenciar la voz del Gobierno de España en el acto de celebración de la Constitución", ha señalado. Para el delegado del Gobierno, este es "un paso inadmisible e inaceptable". "La libertad para Ayuso ya sabemos que significa el silenciar la voz del Gobierno de España en la celebración de la Constitución Española".
Fue precisamente con Martín recién llegado al cargo cuando tuvo lugar la situación más rocambolesca ocurrida en un acto institucional: el ministro Félix Bolaños, que no había sido invitado al acto del Dos de Mayo, trató de colarse en la tribuna de autoridades durante la tradicional parada militar en la Puerta del Sol. Pero si nos remitimos al homenaje a la Carta Magna, el del año pasado acabó convirtiéndose en un cruce de acusaciones y reproches entre el delegado y la presidenta madrileña.
Martín ha saltado también estos días a los medios por otra cuestión: la utilización de una asesora del Ministerio de Presidencia como asistenta personal en los negocios privados de la mujer de Pedro Sánchez.
Y es que, tal y como se desprende de la documentación que ya consta en el del Jugado de Instrucción 41 de Madrid, Begoña Gómez usó a María Cristina Álvarez Rodríguez, a nómina del Estado, para exigir a empresas del Ibex que inscribieran a directivos en los dos máster que dirigía y en gestiones relacionadas con su Cátedra de Transformación Social Competitiva. Lo hizo al menos entre julio de 2020 y febrero de 2024. Durante ese período, Álvarez habría tenido diferentes superiores, entre ellos el actual delegado del Gobierno.