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La 'Marcha de las Putas' se extiende por medio mundo

Bajo lemas como un vestido no significa "sí" o "no es no" miles de mujeres se manifiestan por el mundo. (Volver)

Royhunte dijo el día 18 de Junio de 2011 a las 12:16:03:

Creo que solo tratan exhibiendo su cuerpo de tapar las carencias de su cerebro... Puro complejo de inferioridad. Menos mal que hay muchisimas mujeres que no lo necesitan...

sacseur dijo el día 18 de Junio de 2011 a las 02:26:24:

Aquí en España han recalado unos cuantos miles de sus hijos en las administraciones...

punt dijo el día 17 de Junio de 2011 a las 17:54:12:

[AlURR] Demos por cerrado, pues, el tema. Ha sido un placer intercambiar puntos de vista con vd.

Un saludo.

AlURR dijo el día 17 de Junio de 2011 a las 14:10:24:

punt, queda entendido, ciertamente, estoy de acuerdo en lo esencial con usted. En lo de diferencias sobre el sentido común, me referia a cosas más sutiles, no tanto las de "sinsentido común", que ya por logica, no tienen más justificación que la propia estupidez o profundo desconocimiento de las cosas.

Un saludo.

punt dijo el día 17 de Junio de 2011 a las 13:43:12:

Parece que no sale, reenvío (con algo de edición):

[AlURR] Siento si ha entendido como condescendencia lo que no pretendía ser más que, como traté de aclarar en mi siguiente comentario, una ironía referida al omnipresente relativismo que exige una imposible precisión en aquellas cuestiones de naturaleza difusa, táctica mediante la que se bloquea cualquier opinión relativa al tema (digamos que mientras no se determine dónde está exactamente el medio, queda prohibido debatir sobre los extremos).

En mi opinión, la clave del asunto de por qué hay menos "sentido común" ahora que antiguamente estriba no tanto en el ritmo de vida y lo estricto de las situaciones, sino en el actual enfoque hedonista de la sociedad, en la que proliferan las personas que anteponen su propia voluntad (gustos, preferencias, intereses, caprichos) a todo lo demás y a todos los demás, como si la libertad sólo significase ausencia absoluta de límites y responsabilidades.

Esto aplica tanto a los violadores (que anteponen satisfacer su pasión al respeto por su víctima y por la Ley, cosa que a menudo se debe a un trastorno del comportamiento) como a las "guarras" (que anteponen sus gustos al respeto hacia los demás e incluso a su propia seguridad, cosa que a menudo se debe a una falta de madurez personal: el egoísmo a ultranza es una fase de la infancia).

Este individualismo hace que las personas no vean más allá de sus narices (o de su ombligo, si tienen buena vista), de modo que viven únicamente en clave de sí mismos.

Pero no se confunda: el "sentido común" se tiene o no se tiene y, si se tiene, no admite demasiadas variantes. Así pues, es falso que haya muchos sentidos comunes diferentes pero igualmente válidos: usar un extintor sobre un fuego es de sentido común, mientras que arrojar gasolina es de insensatos. Así, no se puede afirmar que quien defienda la idoneidad de echar gasolina al fuego es que tiene un "sentido común" diferente pero aun así válido porque, al fin y al cabo, no es una ciencia exacta.

Y "arrojar" un ofrecimiento implícito de sexo sobre el "incendio" de un eventual sexópata incapaz de controlarse (que es la excepción, pero los hay y te puedes cruzar con uno) es como echar gasolina al fuego.

Así pues, tenemos un colectivo de "guarras" carentes del sentido común necesario para entender que con su provocación agreden a quienes están a su alrededor, e incluso se arriesgan a ser agredidas por algún incontrolado. Así, desde la insensatez y el desprecio por los demás, sus ombligos reclaman el derecho a tener un comportamiento antisocial, y lo que es más, exigen que nadie mencione siquiera que pueden estar equivocadas y que con su comportamiento se ponen en peligro ellas mismas, aunque ello signifique que más de una sufrirá una violación desencadenada (que no causada) por vestir agresivamente, como tanto defienden.

Al fin y al cabo, lo que estas "guarras" quieren es simplemente provocar, que no es sino agredir a quien disguste esa provocación. Lo han dejado claro con sus "guarrifestaciones".

Un saludo.

AlURR dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 15:10:18:

Agradezco sus explicaciones, no le agradezco tanto su condescendencia sobre mis dudas (grises). Imagino que entiende que tan putada puede ser tener dudas –lo que me permite poder llegar a resolverlas- como estar en el centro absoluto donde también se corre riesgo de anquilosamiento (negro o blanco). Solo son estados diferentes de la misa cosa, y no revisten gravedad alguna si son flexibles lo suficiente como para captar y entender la realidad social de cada momento sin que los perjuicios nos condicionen en demasía.

Esta claro que el sentido común es la base de una sociedad sana o que pretenda serlo. Pero como muchas personas que fueron avanzadas a su tiempo recibiendo por ello las iras de sus contemporáneos: científicos, médicos, o intelectuales por nombrar algunos, fueron los que abrieron mentes antes cegadas por estúpidas normas morales o limitaciones de pensamiento, en aquel momento, según los demás, debían de carecer de dicho sentido común. Si no hubiesen dado el paso y enfrentado a los tabúes que imperaban es ese momento, me pregunto que tipo de sociedad seriamos hoy en día? Y ojo, no todo han sido mejoras, esta claro que hay limites transgredidos que nos conducen hacia un avance positivo para la sociedad, incluso todo lo contrario.

Aún y así, el sentido común no esta ausento de dudas y no tiene la misma medida en todas las personas, de ahí que pueda venir que estas mujeres defiendan vestirse como “putas” y entender que no por ello otros las deban agredir. Todo y eso, yo soy el primero que entiende la condición humana y sus necesidades e instintos, y esta claro que cuando uno ve una chica -en mi caso-, ligera de ropa y provocativa en su forma de vestir, pues se despiertan en mi instintos y sensaciones, es un lenguaje universal, solo que algunos como pasa con el Corán, lo interpretan más radicalmente que otros, ahí vienen parte de los problemas de los que se quejan las mujeres que se visten como “putas”, y reconozco que deberían conocer ese lenguaje universal y saber que sus actos también mandan mensajes confusos para algunos. Buscar el punto intermedio donde tu libertad no se vea coartada -no por el consejo de las autoridades-, sino por los actos de los individuos, no siempre es fácil, y más en sociedades donde los cambios son tan acelerados como en las nuestras, donde no se acaba de digerir una cosa que ya aparecen de nuevas a cuales más transgresoras, lo que posiblemente, cree malos entendidos.

En definitiva, pienso que el sentido común, entendido como lo que te permite estar en cierta armonía con la sociedad donde se vive y que también, protege de los peligros que esta misma tiene, debió ser más sencillo tenerlo (unificado) en los tiempos que todo se movía a otro ritmo y bajo situaciones más estrictas.

et_rusk dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 15:06:03:

Es que creo que en el origen del problema esta la idea de que las mujeres y los hombres somos iguales. No, no somos iguales y tenemos las prioridades distintas y el sistema de valores distintas.

Para ilustrarlo solo dare un ejemplo:
- Colocamos en una isla desertica 10 mujeres y un hombre y en la otra isla desertica 10 hombres y una mujer. Dentro de un año en la primera isla habra 21 habitante y en la segunda 12... aqui esta la diferencia.

punt dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 13:49:28:

[AlURR] Naturalmente, aclarar que el último párrafo de mi anterior comentario no pretende más que ironizar sobre el relativismo a ultranza que a menudo se cuela en razonamientos que, de otro modo, podrían tener bastante razón.

Al final, como esto no es una ciencia exacta, es necesario que cada cual aplique un poco de sentido común y que entienda que una mujer no puede moverse con igual libertad ni comportándose de igual manera, por ejemplo, en un centro comercial de Tokyo o en un arrabal de Ciudad Juárez: los riesgos que se asumen y la percepción que se vaya a tener por quienes te rodean deben ser tenidos en cuenta, no ignorados.

Así, si la policía recomienda no excederse en el vestir para evitar violaciones, tal vez sea porque haya diseminados individuos capaces de descontrolarse ante la vestimenta más provocativa y no ante la más moderada.

Un saludo.

punt dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 12:14:37:

[AlURR] No tenga tantas dudas ni piense que es tan fácil encajar la decencia con la libertad individual que tenemos cada uno.

Empecemos con cómo afecta todo lo dicho a la libertad individual: simplemente, no afecta.

Tal vez le extrañe, pero las recomendaciones no son vinculantes y, como tales, no afectan a las libertades de nadie. Cuestión diferente es cuando el propietario de un local privado establece unas normas de conducta y de vestimenta para aquellos que quieran entrar en su local (sean fiestas a las que acudir sólo con corbata o sólo disfrazados, o templos donde se prohíba entrar con ropa o calzado que contravenga la doctrina moral de la confesión correspondiente).

Y sobre sus dudas sobre dónde está el límite entre lo decente y lo indecente, es algo que establece libremente la propia sociedad, cuando está sana.

Así, una sociedad que pueda calificarse como "sana" admitirá bastante libertad a la hora de vestir y comportarse, pero también generará un justificado rechazo social hacia aquellas conductas que resulten agresivas para con una mayoría de sus ciudadanos.

En el extremo contrario, tenemos a las sociedades enfermas, de las que hay dos tipos:

- las puritanas (como son, por ejemplo, muchas de las actuales sociedades musulmanas), que reaccionan con enorme virulencia contra actitudes completamente inocuas, de modo que imponen medidas absurdas como los burkas para evitar que siquiera un centímetro cuadrado de piel femenina pueda quedar expuesto. Sería una sociedad enferma de "alergia" moral.

- las permisivas (que ahora cada vez más serían las occidentales, según van embebiendo toxinas de tipo progresista o feminazi), que no reaccionan ante las actitudes que resultan claramente agresivas contra muchos de los ciudadanos, lo que envalentona a los agresores, que se sienten legitimados incluso para violar las leyes cuando éstas no tragan con sus desafueros (tenemos un ejemplo en algunas localidades costeras, donde se ha regulado que sólo se pueda ir en bañador por la playa y paseo marítimo, pero no por el casco urbano: muchos intolerantes han optado por la ilegalidad agresiva de ir completamente desnudos "en protesta", ya que les da exactamente igual el daño que puedan causar a los vecinos, que tienen derecho a no ser agredidos de esa manera, niños incluidos). En estas sociedades enfermas, las defensas naturales de la sociedad (como son los tabúes) han quedado anuladas, de forma que la sociedad no rechaza nada, por muy dañino que ésto sea. Aquí tendríamos una sociedad enferma de "SIDA" moral.

¿Dónde queda, pues, la legislación? Muy sencillo: regula que en el ámbito de lo público se eviten los extremos, que son aquellos comportamientos que llegan a ser agresivos (es decir, más allá de lo simplemente ofensivo) para muchos y que a menudo penetran el terreno de lo delictivo, aunque a veces la reglamentación no obedezca estrictamente a criterios morales sino higiénicos o de seguridad ciudadana (como la prohibición de burkas y otros velos islámicos que ocultan el rostro).

Por cierto, no me venga con el relativismo a ultranza de exigir la tipificación exacta del "umbral de excitación" como condición sine que non para poder recomendar no vestir "como putas". Simplemente, se apela al sentido común utilizando una analogía entendible por todos, incluso por las guarras que se han manifestado (que, por lo visto, no sólo han entendido perfectamente lo que se ha dicho sino que lo comparten, puesto que no reclaman que no se califique así a su forma de vestir sino que reclaman su libertad de vestir así, como guarras).

Si el problema es que vd. no dispone de sentido común, entonces lo siento por vd. Verdaderamente, debe ser una auténtica putada vivir en un mundo como éste, con tantos grises intermedios entre el blanco y el negro, sin un mínimo de sentido común que le permita evaluar conceptos difusos.

Un saludo.

AlURR dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 01:03:38:

punt dice: "¿Podría decirnos dónde ve el fallo de este razonamiento?"

Bien, yo lo que veo es que no es una ciencia exacta, y que siempre habra que desee lo ajeno, y aunque si es cierto que cuando más al extremo se va, más fácil es ser agredido, no hay duda de ello. Tambien es cierto que y según la reflexíon que ha realizado, se deduce que ir tapada tanto como es posible disminuye el riesgo en la misma proporción. Pero cuanto más "decente" hay que ir vestida? Que prendas son las adecuadas y cuales no? No todos tienen el mismo umbral de excitación, en que momento se empieza a ser puta/o en la forma de vestir? Se mide en relación a un estándar de excitación en el genero contrario?

Son dudas que me asaltan y que no logro encajar con la libertad individual que tenemos cada uno. No todo es tan claro como se pueda pretender, pues el punto de vista de cada uno y su concepción sobre la provocación ajena varia con suficiente oscilación como para no tenerlo tan claro...

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