LD (EFE) La Oficina Exportadora de Trigo Australiano (AWB) fue acusada de haber pagado cerca de doscientos millones de dólares en sobornos al régimen de Sadam Husein en el caso de corrupción asociada al programa "Petróleo por Alimentos". El propio director del organismo, Andrew Lindber, no desmintió aunque tampoco aseveró, a la comisión investigadora australiana que le entrevistó que pagaron sobornos en Irak para conseguir mayores beneficios en sus ventas de trigo mediante la iniciativa de la ONU.
La AWB, privatizada en 1999, canaliza todas las exportaciones de trigo de Australia, que están valoradas en unos cinco mil millones de dólares anuales (4.128 millones de euros), según datos de la propia compañía.
El abogado John Agius del comité gubernamental investigador, refirió que, según un informe elaborado por dos ejecutivos de la AWB en el año 2001, la firma australiana aprobó el pago de dinero a una empresa fantasma iraquí para aumentar sus beneficios, un diez por ciento de "servicios posventa". El entramado montado partía de contratar a una compañía de transporte asociada al régimen de Sadam, a la que se pagaba en marcos alemanes, lo que permitía a AWB beneficiarse con el cambio de divisas. El gasto del transporte servía para inflar el precio final del trigo vendido a través de la ONU a Irak.
Lindberg, quien fue entrevistado por la ONU en febrero del año pasado, invalidó hoy el testimonió que dio a las Naciones Unidas entonces y justificó el cambio con que ahora conocía cosas que antes desconocía. El entrevistado contestó que no se acordaba cuándo se enteró de los pagos que realizaban a la compañía de transporte iraquí, pero que fue en las últimas semanas.
