L D (EFE) La nueva legislación "ayuda a garantizar la seguridad de este país" y envía un claro mensaje: "nunca nos echaremos atrás ante las amenazas a nuestra libertad". Bush hizo estas declaraciones en la Casa Blanca, en un acto al que también asistieron el vicepresidente Dick Cheney, el jefe del Pentágono Donald Rumsfeld y el fiscal general Alberto Gonzales, además de oficiales militares y congresistas.
La ley, que establece los parámetros sobre el trato, los interrogatorios y los tribunales militares que juzgarán a los sospechosos de terrorismo, es una pieza clave del programa de seguridad que los republicanos pretenden destacar de cara a los comicios legislativos del próximo 7 de noviembre.
Bush pidió al Congreso que preparase esta normativa, después de que en junio pasado el Tribunal Supremo fallara en contra de los tribunales militares establecidos por el Pentágono en la base estadounidense de Guantánamo (Cuba).
El Tribunal Supremo consideró que esos tribunales violaban tanto las leyes estadounidenses como el derecho internacional y dejó en manos del Congreso la tarea de elaborar una ley sobre el trato y enjuiciamiento de presuntos terroristas.
La ley, que establece los parámetros sobre el trato, los interrogatorios y los tribunales militares que juzgarán a los sospechosos de terrorismo, es una pieza clave del programa de seguridad que los republicanos pretenden destacar de cara a los comicios legislativos del próximo 7 de noviembre.
Bush pidió al Congreso que preparase esta normativa, después de que en junio pasado el Tribunal Supremo fallara en contra de los tribunales militares establecidos por el Pentágono en la base estadounidense de Guantánamo (Cuba).
El Tribunal Supremo consideró que esos tribunales violaban tanto las leyes estadounidenses como el derecho internacional y dejó en manos del Congreso la tarea de elaborar una ley sobre el trato y enjuiciamiento de presuntos terroristas.