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Castro pide "una estatua" para Maradona por liderar la marcha contra Bush en Argentina

El dictador cubano, Fidel Castro, ha pedido "una estatua" para Diego Maradona por la decisión del ex futbolista argentino de encabezar el próximo viernes en Mar del Plata una manifestación de repudio contra el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. Maradona, que entrevistó al genocida cubano en su programa de televisión, liderará una marcha junto a Pérez Esquivel y Emir Kusturica y que concluirá con un acto en el que está prevista la actuación del cantante cubano Silvio Rodríguez y un discurso del golpista venezolano Hugo Chávez.

El dictador cubano, Fidel Castro, ha pedido "una estatua" para Diego Maradona por la decisión del ex futbolista argentino de encabezar el próximo viernes en Mar del Plata una manifestación de repudio contra el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. Maradona, que entrevistó al genocida cubano en su programa de televisión, liderará una marcha junto a Pérez Esquivel y Emir Kusturica y que concluirá con un acto en el que está prevista la actuación del cantante cubano Silvio Rodríguez y un discurso del golpista venezolano Hugo Chávez.
(Libertad Digital) "Una estatua para Diego", exclamó el dictador cubano en medio de la risa de Diego Maradona, que presentó la primera parte de una entrevista a Fidel Castro en la duodécima edición de La Noche del 10, el programa que conduce en la televisión argentina.

Fidel Castro aplaudió a Maradona cuando el astro le comentó durante el reportaje, realizado la semana pasada en La Habana, que iba a participar en una de las marchas previstas para rechazar la presencia de George Bush en Argentina, en ocasión de la IV Cumbre de las Américas. El genocida cubano señaló que, en el caso de haber sido invitado, no hubiera asistido a la cumbre "por honor y elemental dignidad", e insistió en que Cuba tampoco acudirá a las reuniones de la Organización de Estados Americanos (OEA). "La OEA tiene mal olor. Un olor apestoso, asqueroso", indicó tras recordar que el organismo "avaló la condena a Cuba y se mantuvo indiferente ante las invasiones de Panamá y Guatemala".

Castro afirmó que en los últimos días ha escuchado "noticias grandiosas" que vienen de Argentina, al aludir a las múltiples manifestaciones de repudio a la presencia de Bush en el país suramericano. "Los argentinos están dispuestos a expresar su repudio a los que siembran el terror", dijo el sanguinario mandatario cubano, que se refirió irónicamente a Bush como el "honorable presidente" de Estados Unidos.

Maradona, que presentó el programa con un uniforme similar al que utiliza Castro, viajará en tren a Mar del Plata el próximo viernes, el día en que se inaugura oficialmente la cita que reunirá a 34 jefes de Estado continentales.

En el denominado Expreso del Alba, el ex futbolista estará acompañado, entre otros, por el director de cine bosnio Emir Kusturica y el activista de izquierdas y Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel. Conviene recordar que este último sujeto mantuvo contactos con ETA, pidió al Gobierno de España que dialogue con la banda aunque esta no deje de matar y criticó al ex presidente Aznar por asumir que "la lucha contra ETA se trataba de un problema policial".

Al llegar a Mar del Plata, 400 kilómetros al sur de Buenos Aires, Maradona liderará una marcha hacia un estadio de fútbol, en el que está prevista la actuación del cantante cubano Silvio Rodríguez y un discurso del golpista venezolano Hugo Chávez.

En la entrevista, Fidel Castro dijo que los organismos de inteligencia cubanos han registrado unos "600 intentos de atentados" contra su vida, "entre ocho y diez" organizados por la CIA estadounidense. Maradona, que admitió estar nervioso al comienzo de la entrevista, mostró la imagen de la cara de Castro tatuada en su pierna izquierda, lo que asombró al dictador de Cuba, a quien también regaló una pelota de fútbol. Concluida esta primera parte del reportaje, "El Pelusa" prometió una segunda para el lunes próximo y reiteró que en su opinión Fidel Castro es, "sin dudas, el más grande de todos". La entrevista, de unas cinco horas, fue grabada la semana pasada en Cuba, país al que el astro argentino viajó por primera vez hace diez años y al que volvió en 2004 para someterse a un tratamiento por su adicción a las drogas.

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