L D (EFE) Chávez ha dejado claro que no está dispuesto a permitir que la oposición democrática le arrebate el poder en las elecciones de este domingo. Ha dicho que para él "está prohibido pasar a la oposición". A pesar de las denuncias de fraude electoral y la violación por parte de su Gobierno de las reglas preelectorales, Chávez se atreve a decir que el sistema electoral venezolano es de los más transparentes del mundo. Y por si sus intenciones no estuviesen claras, añadió que tras ganar el domingo creará una comisión presidencial para estudiar la reforma de la Constitución Nacional, que incluya la reelección indefinida.
En una rueda de prensa en la que comunicó ese supuesto atentado frustrado contra Rosales, Chávez dijo que "hay grupos fascistas radicales que estuvieron preparando un atentado contra el candidato principal de la oposición. Eso lo estamos investigando con pruebas, hasta un arma tenemos en las manos, un fusil con mira telescópica, y un vehículo acondicionado en el que transportaron el fusil".
El gobernante agregó que el supuesto atentado contra Rosales se iba cometer cuando estuviera pronunciando un discurso y reiteró que "eso era para decir que Chávez lo mandó a matar y así generar un caos". "Afortunadamente nuestros cuerpos de inteligencia han mejorado bárbaramente y hemos neutralizado una buena cantidad de planes de gente loca", remarcó.
El gobernante agregó que el supuesto atentado contra Rosales se iba cometer cuando estuviera pronunciando un discurso y reiteró que "eso era para decir que Chávez lo mandó a matar y así generar un caos". "Afortunadamente nuestros cuerpos de inteligencia han mejorado bárbaramente y hemos neutralizado una buena cantidad de planes de gente loca", remarcó.
También dijo que recientemente autorizó al ministro del Interior y Justicia, Jesse Chacón, a reunirse con dirigentes de la oposición al Gobierno, "preocupados" con esos y otros planes de supuestos grupos extremistas. La preocupación de estos sectores opositores también la genera, añadió, "el discurso de algunos que rodean al candidato ex gobernador (Rosales) que dicen que no van a reconocer (el resultado electoral) si no ganan, que hay que ir a la calle a hacer 'guarimbas' (insurrección urbana) y buscar a militares" para un eventual golpe de Estado.
Estos sectores, "algunos jugando a la catástrofe", prosiguió, han planificado sabotajes a trenes, en busca del "efecto Madrid", en alusión a los atentados previos a las elecciones españolas en las que triunfó el actual jefe del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, en marzo de 2004.
Estos sectores, "algunos jugando a la catástrofe", prosiguió, han planificado sabotajes a trenes, en busca del "efecto Madrid", en alusión a los atentados previos a las elecciones españolas en las que triunfó el actual jefe del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, en marzo de 2004.
Chávez se ha referido en los últimos días en repetidas ocasiones a otro plan revelado por Rafael Poleo, director de un diario caraqueño y periodista opositor, y ha advertido que actuará con "mano dura", tras remarcar que "murió el Chávez permisivo". Poleo exhortó públicamente el pasado 6 de noviembre a seguir ese plan que, según explicó, consiste en repetir en Venezuela lo que hizo la oposición en Ucrania en noviembre del 2004. Es decir, que tras ser Chávez declarado vencedor de las elecciones "fraudulentas", se tomarán las calles y avenidas en demanda de la celebración de nuevas elecciones y la Fuerza Armada Nacional (FAN) lo depondrá, presionada por la oposición, como en Ucrania.