"Debido a las circunstancias de los hechos existe la sospecha de que el atentado fue una acción con motivaciones islamistas", subrayó la Fiscalía Federal en un comunicado emitido desde su sede en Karlsruhe, en el centro de Alemania y recogido por Efe.
El ministro de Interior del estado federado de Hesse, Boris Rhein, informó de que el joven ha confesado los hechos en los interrogatorios iniciales y que parece tratarse de un "islamista radicalizado" que presumiblemente actuó solo.
Según informa Der Spiegel, el asesino, identificado como Arid U., tenía la intención de viajar a Afganistán. Como finalmente no pudo hacerlo, optó por cometer un atentado en suelo alemán. Otros medios añaden que su familia se movía en círculos islamistas y hablan de una planificación minuciosa del crimen. Según testigos, gritó en árabe "Alá es grande" en el momento de los disparos.
Arid U. asaltó este miércoles un autobús militar estadounidense ante la Terminal 2 del aeropuerto de Frankfurt y abrió fuego con una pistola contra sus ocupantes, lo que causó la muerte instantánea de dos ellos y heridas de gravedad a otros dos. Los dos heridos continúan en estado crítico, informó la policía local.
Al parecer, el autor del tiroteo efectuó nueve disparos contra los ocupantes del autobús, una docena de militares de las Fuerzas Aéreas estadounidenses que acaban de aterrizar procedentes de su base en la localidad inglesa de Lakenheath.
Todos ellos forman parte de la policía militar de las Fuerzas Aéreas norteamericanas y se dirigían a la base aérea de EEUU en la localidad alemana de Ramstein, desde donde tenían previsto continuar viaje hacia Afganistán o Irak.
El joven kosovar, que carece de antecedentes, fue detenido poco después del ataque por la policía alemana. Los agentes han registrado ya la vivienda del detenido en el barrio de Sossenheim de Frankfurt, donde residía al parecer desde 1991 con sus padres que proceden de una pequeña aldea a las afueras de Mitrovica, en el norte de Kosovo.
El nuevo ministro federal de Interior, Hans-Peter Friedrich, señaló que, pese al atentado, no considera necesario elevar el nivel de alarma terrorista en Alemania ante los datos de que se dispone sobre el crimen. Pese a todo, en el aeropuerto, el mayor de la Europa continental, se han vuelto a incrementar las medidas de seguridad y patrullan parejas de policías armados con metralletas y protegidos con chalecos antibalas.