El embajador de EEUU cree que los organismos internacionales deberían visitar las cárceles de Cuba

L D (EFE) En una entrevista con Efe, el embajador estadounidense que abandonará su cargo el próximo día 20 cuando tome posesión la nueva Administración presidida por Barack Obama, subrayó que las prioridades de Bush con respecto a Cuba han sido "claras y escuetas". "Quisiéramos ver a los presos políticos fuera de la cárcel", dijo Aguirre.

Tras indicar que el penal de Guantánamo es "la única cárcel en la isla de Cuba que es bien visitada" por delegados internacionales y de la Cruz Roja, expresó su interés en "ver el mismo escrutinio en las cárceles de Cuba donde están los presos políticos" para ver cómo les tratan.

Aguirre dijo desconocer cuáles serán las "prioridades" de Obama respecto a Cuba, pero incidió en los reclamos formulados por la Administración Bush a la isla caribeña. Además de la puesta en libertad de los presos, Aguirre se refirió a la necesidad de que los cubanos se expresen libremente y de que "algún día tengan la capacidad de escoger su propio gobierno dentro del marco de la democracia".

El embajador subrayó que cada uno de los países de Latinoamérica presenta "una relación, un reto y una oportunidad", y destacó que con todos ellos, muy diferentes entre sí, EEUU mantiene relaciones diplomáticas, a excepción de Cuba. En algunos casos tenemos, dijo, más cercanía que con otros, pero Latinoamérica es parte del hemisferio Occidental, y "estamos viviendo en el mismo barrio, así que mientras mejor nos llevemos, mejor".

Eduardo Aguirre señaló la importancia que otorga EEUU a las relaciones con sus vecinos del norte y del sur, Canadá y México, respectivamente, y prueba de ello es que el presidente electo, Barack Obama, antes de tomar posesión de su cargo recibió ayer en Washington al presidente mexicano, Felipe Calderón.

México y Estados Unidos "siempre estamos buscando alguna forma para mejorar la fluidez de las relaciones" comerciales, migratorias o de lucha contra el narcotráfico, dijo el embajador, que eludió pronunciarse sobre países como Venezuela o Bolivia. Aguirre se refirió a "la confianza" y "credibilidad" que existe entre Estados Unidos y España y su beneficio en las relaciones con Latinoamérica.