LD (Agencias) En una declaración pública, el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, aseguró que el estatuto autonómico que viene impulsando ha recibido más del ochenta por ciento de los votos depositados en el referendo. Proclamó que la aprobación marca el camino "hacia una nueva república" que hará de Bolivia "el estado más descentralizado de América Latina". Insistió en que la autonomía departamental garantiza la unidad del país y abogó por llegar a un "gran acuerdo nacional" que armonice las normas del Estado y fortalezca las instituciones de la república.
Costas recordó que el estatuto ratificado será la norma básica que regirá la autonomía "respetando los altos intereses de la república" y, por tanto, "estará abierto a ser debatido y mejorado" en lo que fuera necesario "por voluntad" de los cruceños. Aseguró que se "ha consolidado el inicio de la reforma de mayor trascendencia en nuestra patria", pero advirtió de que la "lucha por la democratización del poder no será fácil" por las "trabas y distorsiones" de la "miopía centralista".
Los enfrentamientos violentos en enclaves oficialistas de la región como San Julián, Montero o Yapacaní ensombrecieron una jornada que dejó un saldo de más de 35 heridos de diversa consideración. También se investiga si el fallecimiento de un hombre de 68 años en el Plan 3.000, un barrio humilde de la capital cruceña, está relacionado con los choques entre seguidores del presidente Evo Morales y autonomistas ocurridos en ese lugar. A pesar de los incidentes, miles de cruceños salieron a las calles de la capital al final del día para celebrar su estatuto.
Santa Cruz, considerada la región más próspera de Bolivia, lidera un movimiento de autonomía que secundan otras regiones opositoras como Beni, Pando y Tarija, que tienen previsto celebrar también consultas en el mes de junio para aprobar sus estatutos. Otras dos regiones, Cochabamba y Chuquisaca, también apoyan el proceso autonómico aunque no han fijado la fecha de sus referendos. El país vive sumido en una profunda crisis política y protestas a causa de la "refundación constitucional" que impulsa el Gobierno de Morales, cuyo proyecto de Constitución aún debe ser ratificado mediante referendo.