Un grupo de supuestos islamistas radicales, ayudados por varios vecinos, cortaron una oreja a un cristiano al que acusaban de dirigir una red de prostitución en la localidad de Qena, en el sur de Egipto, informó hoy el diario Al Shuruq.
Según el periódico independiente, la Fiscalía de Qena, donde ocurrió el incidente el pasado lunes, pidió ayer que un equipo médico examinara a la víctima y que la policía científica analizara el coche y la casa del supuesto proxeneta, que fueron quemados por el grupo de radicales, según recoge Efe.
La Fiscalía ordenó, asimismo, el arresto inmediato de los autores de la agresión, según los cuales la víctima, identificada como Ayman Anwar Mitri, utilizaba su apartamento como centro de operaciones para dirigir una red de prostitutas, entre las que había musulmanas.
Uno de los vecinos del agredido dijo a Al Shuruq que los agresores no habían actuado antes por miedo al cuerpo especial de la policía encargado de los delitos contra la Seguridad del Estado, pero que ahora, tras su disolución, habían decidido irrumpir en la casa.
"Hubiéramos reaccionado de la misma manera si el dueño de la casa hubiera sido musulmán", dijo el vecino, que el periódico no identifica, ni tampoco aclara si participó en el asalto.
Por su parte, "una fuente cristiana" citada por el rotativo afirmó que miembros de su comunidad denunciaron el incidente porque los islamistas aplicaron una versión estricta de la Sharía (ley islámica) antes de probar que la víctima estaba implicada en la dirección de la supuesta red de prostitución.
A través de la red social de Facebook, numerosos cristianos, que representan un diez por ciento de la población egipcia, de unos ochenta millones de habitantes, condenaron el incidente y pidieron que se presenten a la Justicia a los islamistas implicados en el hecho.