L D (Agencias) La susodicha versión oficial considera proporcionada la represión desencadenada por el Ejército contra los manifestantes que, en la noche del 3 al 4 de junio de 1989 y en la tristemente célebre Plaza de Tiananmen, reclamaban el fin de la dictadura. Aunque no se ha podido dar una cifra exacta del número de víctimas mortales, algunas fuentes estiman que alcanzó las 3.000.
Por medio de un comunicado del que da cuenta la agencia Europa Press, RSF exigió este miércoles a la dictadura china que ponga fin a la censura sobre tales sucesos, que libere a 27 periodistas y 61 disidentes encarcelados por publicar sus opiniones en la Red, que deje de acosar a los corresponsales extranjeros y que permita el regreso de los periodistas exiliados.
Asimismo, recordó que alrededor de 40 periodistas extranjeros han sido detenidos en China en la última década por intentar entrevistarse con supervivientes de Tiananmen, y que siempre que se acerca el 4 de junio los corresponsales son sometidos a estrecha vigilancia.
Desde 1989 la tiranía comunista ha encarcelado a más de 130 periodistas, 43 de los cuales participaron directamente en la "Primavera de Pekín". Tres de estos últimos todavía se encuentran presos: Yu Dongyue, crítico de arte de Noticias de Liuyang, detenido el 23 de mayo del 89 y condenado a 20 años de reclusión; Chen Yanbin, codirector de la revista clandestina Tielu, apresado en 1990 y condenado a 15 años, y Liu Jingsheng, de la igualmente clandestina Tansuo, capturado en 1992 y condenado a otros 15 años.
RSF también se hace eco del caso de Huan Qi, fue encarcelado el 3 de junio de 2000 "por dejar que se publicaran en su sitio, albergado en Estados Unidos tras una primera prohibición en China, algunos artículos sobre la masacre de la Plaza de Tiananmen". Qi fue condenado a cinco años de cárcel por "subversión" e "incitación al derrocamiento del poder del Estado", explica el comunicado de la mencionada organización.