L D (EFE) Según informó este martes la Policía norirlandesa (PSNI) los sospechosos están siendo interrogados por el intento de asesinato de Brendan Devine, un amigo del fallecido que se encontraba en el bar Magennis cuando se produjo el ataque y que resultó gravemente herido.
Tras aquel ataque, las hermanas y novia de McCartney iniciaron una campaña nacional e internacional para que los responsables fueran llevados ante la Justicia, al tiempo que denunciaron que testigos del crimen habían sido intimidados por el grupo armado. Posteriormente, el IRA expulsó a tres de sus miembros y ofreció "disparar" contra los que mataron a McCartney, una opción que fue rechazada por la familia.
Sus allegados han llegado a presentar su caso en Washington, donde se han reunido y obtenido el apoyo del presidente estadounidense, George W. Bush, y de varios importantes senadores, entre ellos Hillary Clinton, Edward Kennedy y John McCain.
También han denunciado repetidamente que miembros del IRA les han amenazado con incendiar sus domicilios en Short Strand, enclave católico dentro del este de Belfast (zona de mayoría protestante), si no cejan en su empeño por llevar a los asesinos ante la Justicia.
Desde el pasado junio, otros dos hombres –de 36 y 49 años– permanecen bajo custodia policial acusados del brutal asesinato de McCartney, un crimen que levantó a parte de la comunidad republicana del Ulster contra el IRA y su brazo político, el Sinn Fein.
Tras aquel ataque, las hermanas y novia de McCartney iniciaron una campaña nacional e internacional para que los responsables fueran llevados ante la Justicia, al tiempo que denunciaron que testigos del crimen habían sido intimidados por el grupo armado. Posteriormente, el IRA expulsó a tres de sus miembros y ofreció "disparar" contra los que mataron a McCartney, una opción que fue rechazada por la familia.
Sus allegados han llegado a presentar su caso en Washington, donde se han reunido y obtenido el apoyo del presidente estadounidense, George W. Bush, y de varios importantes senadores, entre ellos Hillary Clinton, Edward Kennedy y John McCain.
También han denunciado repetidamente que miembros del IRA les han amenazado con incendiar sus domicilios en Short Strand, enclave católico dentro del este de Belfast (zona de mayoría protestante), si no cejan en su empeño por llevar a los asesinos ante la Justicia.
Desde el pasado junio, otros dos hombres –de 36 y 49 años– permanecen bajo custodia policial acusados del brutal asesinato de McCartney, un crimen que levantó a parte de la comunidad republicana del Ulster contra el IRA y su brazo político, el Sinn Fein.