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La policía reabre el Congreso de EEUU tras una falsa alarma por un tiroteo que pudieron ser ruidos de una obra

Según informan la CNN y Fox News los ruidos que desencadenaron la alarma por un presunto tiroteo en el edificio Rayburn del Congreso de EEUU, pudieron provenir de una obra, en concreto de un martillo neumático. La Policía ha reabierto las instalaciones después de que agentes de diversos cuerpos policiales registrasen, una a una, todas las dependencias del edifico. Ni rastro de heridos y tampoco hay nadie detenido.

Según informan la CNN y Fox News los ruidos que desencadenaron la alarma por un presunto tiroteo en el edificio Rayburn del Congreso de EEUU, pudieron provenir de una obra, en concreto de un martillo neumático. La Policía ha reabierto las instalaciones después de que agentes de diversos cuerpos policiales registrasen, una a una, todas las dependencias del edifico. Ni rastro de heridos y tampoco hay nadie detenido.
L D (Agencias) La policía del Capitolio registró sala por sala uno de los edificios del Congreso de EEUU, donde presuntamente se escucharon disparos este viernes por la mañana. Los agentes del FBI, del cuerpo de seguridad del Capitolio y otros servicios policiales identificaron a todas las personas que estaban en el edificio Rayburn. "Una vez que estén identificadas adecuadamente serán acompañadas fuera", decía la sargento Kimberly Schneider, portavoz de la policía, en la última rueda de prensa en la que informaba de la investigación.
 
Según una reportera de Efe que se encontraba en el edificio, agentes del FBI y de la policía del Capitolio entraron en cada sala del edificio para registrar las oficinas y entrevistar a sus ocupantes. Mientras, equipos de cinco agentes se movían lentamente por los pasillos apuntando con metralletas, según la periodista.

La policía trasladó a la cafetería del edificio a turistas, mujeres embarazadas y otros individuos "para que estén más cómodos", informaba el teniente Planchart a las personas que se hallaban en el edificio. Cada treinta minutos, se escuchaba el siguiente mensaje por el servicio de megafonía: "se está investigando que se escucharon disparos en el garaje. Por favor regresen a las oficinas". Schneider dijo que no ha habido arrestos y que la policía no ha identificado "a nadie que pueda tener un arma". Tampoco se han registrado heridos. Una mujer tuvo un ataque nervioso y fue evacuada en camilla del edificio. La policía ordenó a todos los presentes en el edificio Rayburn a recluirse en las oficinas poco después de que se conociese el incidente, según la reportera de Efe, que había acudido a una conferencia de prensa sobre Inmigración.

La alarma comenzó a las 10:30 de la mañana de este viernes, hora local, cuando la policía del Capitolio recibió una llamada en la que una persona denunció haber oído disparos en el garaje del edificio Rayburn, que alberga oficinas de legisladores de la Cámara de Representantes. Schneider afirmó que la policía aún no ha podido confirmar que efectivamente se produjeron los disparos y desconoce la identidad de la persona que llamó.

Aún así, la sargento dijo: "Estamos tratando esto como un asunto muy serio". "Es prematuro asumir que puede que no haya un hombre armado", añadió. El tiroteo se produjo supuestamente en el garaje del Rayburn, que tiene tres niveles en el subsuelo y cuyo acceso está restringido a personas con pases especiales. En el sótano del edificio también hay unas instalaciones de tiro al blanco que usan los policías del Capitolio para entrenarse.

La zona alrededor del Rayburn, en el centro de Washington, fue acordonada por una fuerte presencia policial. El Capitolio, el edificio principal del Congreso donde se celebran los plenos, fue sellado inicialmente pero se volvió a abrir. Inmediatamente tras recibir la llamada de alerta, la policía se comunicó con los legisladores y el personal del Rayburn para pedirles que evacuasen los pasillos y entrasen en las oficinas.

Según la cadena de televisión CNN, se trata de una medida habitual cuando se produce un incidente de este tipo porque permite a los agentes identificar a posibles sospechosos. La seguridad en el Congreso, al igual que en todos las sedes oficiales del Gobierno de EEUU, se incrementó a raíz de los atentados del 11 de septiembre del 2001.

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