LD (EFE) Veintidós civiles resultaron heridos, varios de ellos muy graves, después de que explotara en Kabul un coche-bomba conducido por un terrorista suicida. El ataque, que ha tenido como objetivo un convoy de la ISAF, ha tenido lugar en la carretera que conduce al aeropuerto internacional de Kabul.
El jefe de la Policía de Kabul, Alí Shah Paktiawal, había asegurado previamente que el estallido dejó al menos diez heridos, cinco de ellos muy graves, y que al menos tres vehículos civiles también resultaron dañados. La carretera que une el aeropuerto con Kabul es uno de los puntos más sensibles de la capital afgana, sometido a una constante vigilancia por parte de patrullas de la ISAF.
En Afganistán se encuentra actualmente el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, que tiene previsto reunirse este mismo martes con el presidente afgano, Hamid Karzai.