(Libertad Digital) El Mundo ha elegido a Barack Obama como el hombre del año 2008. Para tal efecto, ha publicado un especial con cuatro textos sobre el presidente electo de EEUU. El último de ellos, el de la contraportada, es el del presidente del Gobierno. En sus líneas, José Luis Rodríguez Zapatero vuelve a demostrar la gran admiración que tiene por Obama.
En su artículo titulado "El horizonte del cambio", el jefe del Ejecutivo español dice que el triunfo de Obama en las elecciones del pasado 4 de noviembre es "una nueva prueba de aquella idea de Hannah Arendt sobre la capacidad de la política para producir nuevos comienzos, la idea de que la política permite a las sociedades humanas volver a empezar de nuevo". Cree que los que votaron por él buscaban "comenzar de nuevo, estrenar esperanzas. Esperanzas de paz, prosperidad económica, solidaridad social, libertad".
Señala además que "Obama representa la integración de esa diversidad, una integración que es, sin duda, problemática, compleja, pero alcanzable y que, en todo caso, merece ser buscada y no desechada" y agrega que tal vez por eso el presidente electo "insiste tanto en denunciar al peor enemigo de la política: el cinismo". Zapatero muestra su confianza ciega en el demócrata y se muestra convencido de que "no va a bajar los brazos frente al totalitarismo ni frente a la violencia" pero que a su vez "no los levantará guiado por los prejuicios, la ira o el deseo de venganza".
Zapatero, que tanto ha achacado en los últimos meses la actual situación económica a dicho país y a la Administración Bush, cree ahora, con el nuevo presidente, que "EEUU va a superar esta crisis más pronto que tarde, y que haciéndolo contribuirá también a ahuyentar la crisis global". Termina su texto apuntando que "la victoria de Obama ha traído fuerzas nuevas al bando de la política" y que "él mismo representa el triunfo de la ilusión".