Los primeros alcaldes de Bildu están empezando a estrenar sus cargos quitándose la careta y haciendo un adelanto de lo que pueden ser los próximos cuatro años en los ayuntamientos donde gobiernan. Así, en localidades como Andoain, Lasarte o Mondragón han impedido a los escoltas de los concejales de PP y PSE entrar en el edificio físico del consistorio. Además, han empezado ya a retirar los arcos detectores de metales y los escáneres de seguridad.
Ante esta situación, la Asociación de Escoltas en Activo del País Vasco y Navarra emitió este viernes un comunicado en el que afirma que no están en condiciones de garantizar la seguridad de sus protegidos en los ayuntamientos de Bildu donde se han tomado estas medidas, así como en otros donde pueden tomar decisiones similares.
Según dice, tiene "noticias de la generalización de estas medidas en los ayuntamientos gobernados por Bildu, por lo que alertamos del aumento de la inseguridad para los cargos políticos a nuestro cargo" y censura que la coalición electoral "evita condenar la violencia etarra o el rearme de la banda terrorista".
La asociación asegura que, "por responsabilidad", los escoltas vascos y navarros "mantenemos nuestro nivel de alerta para que ninguno de nuestros protegidos pueda ser víctima de una agresión" y piden "encarecidamente" al Gobierno vasco e Interior en Navarra, que "medite cada decisión que se tome en relación a la seguridad de personas amenazadas y analice en profundidad la realidad que se vive en este momento en el cien por cien de localidades del País Vasco y Navarra, sumidas bajo el imperio del terrorismo de persecución, la amenaza y la extorsión de ETA y su entorno".