El presidente de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales FAES y presidente de honor del Partido Popular, José María Aznar, ha declarado que "nosotros podemos presentar la España más próspera y ellos nos van a dejar una España arruinada". "La herencia que va a recibir Mariano Rajoy es un país débil y agrietado; económicamente un país intervenido desde el exterior y arruinado; e internacionalmente un país menguante e irrelevante. Es la peor herencia que nadie ha recibido en la democracia española y esa es la diferencia de balances", ha asegurado.
Aznar ha hecho estas declaraciones hoy sábado 12 de noviembre en el acto público del Partido Popular en Las Rozas (Madrid), donde también se ha referido a la banda terrorista. "ETA esta derrotada y si esta derrotada no hay que negociar nada". "Lo que ETA no ha conseguido matando no es aceptable que lo consiga de ninguna manera por dejar de matar. Eso tiene que quedar terminantemente claro", ha ratificado.
Asimismo, el presidente de honor del PP ha censurado en su discurso la política económica del actual Gobierno socialista. "Nos han arruinado el presente y comprometido gravemente el futuro. Lo más grave es que hay uno que pide moratorias en lugar de tomar la iniciativa -en clara referencia a Rubalcaba-, y otro se va a Bruselas y acepta una quita de la deuda española -en alusión a Zapatero-, acepta sin rechistar que nos rebajen el crédito a nosotros que habíamos tenido hace años más credibilidad en nuestra deuda que los alemanes; tenemos que aceptar y lo aceptan sin rechistar, en una puñalada que se da al corazón económico de la confianza de España, que vamos a ser poco menos que incapaces de pagar nuestras deudas. Esto es lo que ha gobernado a España ocho años."
"Quiero para mi país no el espectáculo bochornoso del último Consejo Europeo donde me imponen algo inaceptable y donde España es el pagano de facturas que no le corresponden. Quiero a mi país en la mesa donde se toman las decisiones y no aceptando ninguna imposición", ha afirmado.
Aznar ha recordado además que, en 20 años, España no fue capaz de generar empleo: "En 1976 trabajaban en España 12.200.000 personas; en 1996 trabajan 12.200.000. Entre el 76 y el 96 España no había sido capaz de crear un solo puesto de trabajo neto. En el año 2004 trabajaban 18 millones de personas. Eso es una revolución social. Por eso fue posible mantener un Estado de bienestar", ha mantenido. "Que no nos vengan con el cuento de la vieja. Somos los que hemos creado empleo, no ellos", ha proclamado.
Por otra parte, Aznar ha recordado que "cuando entregamos el testigo dejamos como herencia una España solida y fuerte, el país económicamente más próspero de toda la historia. Un país respetado internacionalmente, situado donde se influye y donde se decide y no donde deciden a tu costa". Por el contrario, "la herencia que va a recibir Mariano Rajoy es un país débil y agrietado; económicamente un país intervenido desde el exterior y arruinado; e internacionalmente un país menguante e irrelevante. Es la peor herencia que nadie ha recibido en la democracia española".
En este sentido, ha insistido en que "nosotros podemos presentar la España más próspera y ellos nos van a dejar una España arruinada. Vamos a afrontar la realidad, a tomar decisiones, a tener una mayoría y una vez más vamos a demostrar que cuando gobiernan los socialistas lo único que hacen es arruinar el país y a nosotros nos toca sacarlo adelante y sembrar el futuro de España de oportunidades para todos los españoles".
Aznar se ha referido asimismo a la banda terrorista ETA y ha manifestado que "ETA esta derrotada y si esta derrotada no hay que negociar nada". "Ahora -ha proseguido- nos mandan un mensaje y dicen: ‘Nosotros abandonamos ésto, aceptamos no utilizar estos medios, cambiamos de estrategia; pero vosotros aceptáis nuestros fines’. Eso no se puede comprar porque significa que al cabo de cincuenta años algunos quieren dar la razón a ETA, y lo que ETA no ha conseguido matando no es aceptable que lo consiga de ninguna manera por dejar de matar. Eso tiene que quedar terminantemente claro".
"Ni la memoria de las víctimas ni las instituciones españolas ni el Estado de derecho ni la democracia ni la nación española van a pagar ningún precio a nadie que quiera cobrarse algo que es totalmente inaceptable a nuestra costa", ha subrayado.
"Ninguna democracia ni nación en el mundo tiene por qué aceptar en su seno y menos en sus instituciones a gente que quiere destruir las instituciones, la democracia o la misma nación de la cual se quieren servir", ha aseverado. "No hay más agenda que la de la aplicación de la ley y el Estado de derecho para todos los que desafían la autoridad".
Finalmente, Aznar ha llamado a los españoles a recuperar la confianza en nosotros mismos, en nuestras instituciones, en las posibilidades de nuestro país: "Tenemos que volver a sembrar ambiciones y objetivos comunes porque cuando hemos confiado en la nación española hemos conseguido grandes cosas".
Aznar ha insistido en que "tenemos motivos serios para estar esperanzados. Lo que no tenemos es tiempo que perder. No tenemos que seguir aguantando políticas equivocadas ni políticos frívolos e incompetentes. Necesitamos un cambio indispensable para mejorar el presente y afrontar el futuro de España".
Por último, ha destacado que "nadie tiene más ilusión que yo por ver a Mariano Rajoy de presidente del Gobierno de España. Estoy convencido que va a tomar las decisiones que España necesita y va a ser un gran presidente. Allá donde nos toque volveremos a poner en marcha el país. Con nuestras banderas volveremos a recuperar a la mayoría de los españoles para el bien y para el futuro de España".