La exdirigente de Batasuna-ETA Aurore Martin y el miembro de Ekin Josu Esparza, en busca y captura desde que la Justicia francesa decidiera su entrega a España, participaron en una manifestación independentista en Bayona apoyada por colectivos de la órbita de ETA y la izquierda francesa. Según informa Efe, no fue visible ningún control policial sobre ellos a pesar de que el dispositivo de las Fuerzas de Seguridad era importante.
Ambos fueron aplaudidos y saludados efusivamente por los participantes en la marcha, como el diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano. No obstante, no se colocaron en cabeza del cortejo, donde iba la pancarta en la que se podía leer -en francés y en euskera- "País Vasco, solución democrática ahora", y tampoco pronunciaron ningún discurso.
Martin, la primera persona de nacionalidad francesa para la que los jueces franceses dieron su visto bueno, a finales de 2010, a una euroorden de la Audiencia Nacional de Madrid para ser juzgada por terrorismo, había anunciado el pasado día 1 que asistiría a esta manifestación con Esparza en una entrevista a un periódico francés.
En cabeza del desfile hubo sobre todo representantes políticos de organizaciones proetarras del sur de Francia, pero también acudieron responsables de otras formaciones políticas francesas, como los ecologistas, el centrista MoDem y el Partido Socialista (PS), en particular el secretario de la federación del departamento de los Pirineos Atlánticos, Pierre Sheret.
Sheret explicó a Efe que estaba presente a título personal y en primer lugar en apoyo a Aurore Martin, ya que está en contra de que se le aplique el mandato de arresto europeo, y también por ser la primera manifestación "después del anuncio de ETA del fin de la lucha armada". Y aclaró que el PS no figuraba entre los convocantes de la marcha porque hay una serie de cuestiones que primero deben debatirse internamente, como la de los presos. En la manifestación se pidió la liberación de los presos etarras "liberables" y la "reagrupación" del resto, es decir, el acercamiento al País Vasco. También se exigió la legalización de Batasuna y la desactivación de los mandatos de arresto europeo, así como "pasos" a los Gobiernos español y francés.
El Tribunal Supremo de Francia dictaminó, el 16 de diciembre de 2010, que Aurore Martin debía quedar en manos de la Justicia española, que la reclama por su implicación en actos en España con Batasuna-ETA, organización legal en Francia.
Pese a la euroorden, Martin ha dado varias entrevistas y ha participado en diversos actos públicos. La policía francesa fue a detenerla el 21 de junio a una vivienda de Bayona en la que fue localizada, pero las fuerzas del orden dieron marcha atrás ante la presencia de un nutrido grupo de personas que se opusieron al arresto.
Esparza, por su parte, está en busca y captura desde que el 15 de noviembre pasado el Tribunal de Apelación de Pau dictaminara su entrega a España por su pertenencia a Ekin, la estructura del aparato político de ETA dedicada a imponer las tesis de la dirección de la banda a los colectivos de su órbita.