En la misiva, Andrea Fabra pide al presidente del Congreso, Jesús Posada, que le haga llegar al PSOE y al resto de partidos su "sincera petición de perdón" por su "inapropiada expresión proferida durante el pleno del pasado 11 de julio".
Fabra reitera que se dirigió a los diputados del PSOE y añade que cometió "un error" del que no se "siente honrada" y por el que recurre "a la benevolencia de la Cámara rogándole que estime" sus disculpas.
La diputada afirma que no ha querido "dañar" en la "dignidad, imagen y prestigio" a la Cámara de los Diputados "especialmente en estas circunstancias difíciles que vive nuestro país y que nos exigen a todos los representantes de los ciudadanos un comportamiento irreprochable".
Termina indicando que esta rectificación la hace "desde la lealtad a su conciencia" y convicciones personales y políticas y el respeto que siente por quienes tienen posiciones distintas a la suya. También destaca la "altura de miras" que debe presidir la actuación del diputado y añade que ella "no escatimará esfuerzos" para "hacer honor a este compromiso" en esta legislatura.
Amonestación verbal de Posada
Fabra ha entregado personalmente la misiva en un encuentro en la Cámara baja con Jesús Posada, en el que el presidente del Congreso la ha amonestado verbalmente por conducta "totalmente inadecuada". Según ha explicado el propio Posada en el pleno, aunque no puede ordenar la retirada del citado exabrupto del Diario de Sesiones, puesto que no fue recogido por el mismo, sí quiere que las palabras pronunciadas en el Pleno de este martes a este respecto queden "expresamente incorporadas".
Posada no ha querido concluir sin mostrar su deseo de que incidentes de estas características no vuelvan a reproducirse en el futuro. "Espero y deseo que hechos como éste, que dañan objetivamente el prestigio de la Cámara, no vuelvan a producirse en el futuro", ha zanjado.