L D (Agencias) En una entrevista a Herri Irratia-Loyola Media, el presidente del PP de Álava, Alfonso Alonso, ha afirmado que el partido que preside "confía en Mariano Rajoy". "No tenemos ningún problema de confianza con Rajoy, apoyamos a Mariano Rajoy, la inmensa mayoría de los miembros del PP de Álava", dijo. Por esta causa, instó a San Gil y al presidente nacional del partido a "hacer un esfuerzo por recomponer la unidad".
A su juicio, "lo importante en un partido no es que haya crisis, que es muy desagradable". "Aquí hay una crisis, manifestada por María San Gil cuando duda de la confianza, duda de Mariano Rajoy o tiene ella una crisis de confianza en Mariano Rajoy, una situación muy difícil para nosotros", aclaró.
Durante la entrevista, Alonso se dirigió a la presidenta del PP en el País Vasco para asegurarle que "cuenta con el respaldo del partido en Álava, porque es nuestra presidenta y es nuestra candidata". "Vienen unas elecciones y nosotros queremos defender su candidatura en esas elecciones vascas", agregó."María, tienes que hacer un esfuerzo por recomponer esto, porque os necesitamos a los dos", dijo.
Alonso manifestó que tanto Rajoy como San Gil tienen que ser "un punto de conciliación" porque "nos jugamos mucho" en unas elecciones "a la vuelta de la esquina". "El PP es la gran casa común de todo el centro derecha, habrá sensibilidades diferentes pero que comparten unos cuantos principios, la gente siempre nos ha visto en esa coherencia", señaló.
No quiere adelantos, tal y como requiere San Gil
El presidente de los populares de Álava se mostró convencido de que "no hace falta" celebrar un Congreso, y así se lo ha hecho saber a la propia San Gil a quien le ha comunicado el total apoyo del partido. "No sé si ella nos explicará el lunes las razones por las que insiste tanto en que debe celebrarse un congreso en el País Vasco, tiene nuestro respaldo, no vamos a plantear ningún cambio en la línea ideológica del partido ni un cambio de presidenta del partido del País Vasco, tiene nuestro apoyo para ser candidata y lo ha tenido siempre, no veía la necesidad de hacer ningún congreso", enfatizó.
Por contra, consideró necesario "cerrar filas como siempre hemos hecho" y prepararse "para la oferta que el PP va a hacer para los ciudadanos en la próxima convocatoria electoral". "Cuanto antes cerremos este episodio mejor, si no somos capaces de cerrarlo pronto estaremos cometiendo una grave equivocación", dijo. En su opinión, la "pluralidad" es un "factor de fortaleza" para la formación y advirtió de que utilizar esta circunstancia para "discutir" en el seno del propio partido podría hacerle volver "a las circunstancias penosas que vivió el centro derecha en los años 80".
Oyarzábal dice que "todo esto tiene arreglo"
Por su parte, el secretario general del PP de Álava, Iñaki Oyarzábal, que en los últimos días ha mostrado su clara discrepancia con la decisión de San Gil, ha dicho en los pasillos del Parlamento Vasco que "estamos por la unidad del partido", porque "tenemos confianza en el PP". Oyarzábal se ha limitado a señalar que "todo esto tiene arreglo" y que "aquí cabemos todos y todos tenemos que estar más unidos que nunca".
María Dolores de Cospedal y José Manuel Soria han criticado que San Gil hiciera pública su desconfianza en Mariano Rajoy tras el viraje de su estrategia política.
La presidenta del PP de Castilla-La Mancha ha aseverado que "si hay una persona que no tiene confianza en otra", la otra puede decir que "el que no me fío de ti soy yo". En declaraciones a Antena 3, De Cospedal ha indicado que la confianza "es recíproca", por lo que, "si hay una persona que no tiene confianza en otra", la otra puede decir que "el que no me fío de ti soy yo". Así se refería a la relación entre Rajoy y San Gil a la par que precisaba que este "asunto privado" debería haberse llevado de manera privada, y "no de la manera en que se ha hecho".
A este respecto De Cospedal ha dicho que "hay personas" que opinan públicamente y no lo hacen "en los órganos en que tienen que opinar". Eso sí, ha aclarado que con ello no dice que éste sea "el caso concreto" de San Gil, pero que este comportamiento no le parece "el más adecuado, ni tampoco el más valiente". "Hay que tener cuidado con estas cosas" porque "a veces uno tiene la intención de conseguir un objetivo y se pasa de frenada", ha aseverado.
A este respecto De Cospedal ha dicho que "hay personas" que opinan públicamente y no lo hacen "en los órganos en que tienen que opinar". Eso sí, ha aclarado que con ello no dice que éste sea "el caso concreto" de San Gil, pero que este comportamiento no le parece "el más adecuado, ni tampoco el más valiente". "Hay que tener cuidado con estas cosas" porque "a veces uno tiene la intención de conseguir un objetivo y se pasa de frenada", ha aseverado.
Ni dolido ni decepcionado
Por su parte, el presidente del PP en Canarias, José Manuel Soria, ha dicho que no tiene "ninguna decepción" ni está "dolido" con San Gil, a la que admira "muchísimo", pero ha añadido que no entiende "el porqué ni la razón de la decisión que ha tomado" al abandonar la ponencia política del XVI Congreso.
En declaraciones a TVE, Soria ha negado otra vez que hubiera diferencias con San Gil sobre el contenido de la ponencia política y ha atribuido su decisión a la falta de confianza de la dirigente vasca en el líder nacional, Mariano Rajoy. Sin embargo, ha reconocido que él no era partidario de incluir a todos los partidos nacionalistas "en el mismo cajón" y que, si se decidió así, fue porque Alicia Sánchez Camacho y él cedieron ante la posición de María San Gil porque es "un referente moral y político y creíamos que, en eso, si alguien tenía que ceder éramos nosotros".
Ha negado "rotundamente" que hubiera algún motivo "atribuible directamente al contenido" de la ponencia para que San Gil decidiera abandonarla porque, según ha dicho, fue acordado y suscrito por los tres ponentes el domingo por la tarde, horas antes de que la dirigente vasca anunciara su decisión.
En declaraciones a TVE, Soria ha negado otra vez que hubiera diferencias con San Gil sobre el contenido de la ponencia política y ha atribuido su decisión a la falta de confianza de la dirigente vasca en el líder nacional, Mariano Rajoy. Sin embargo, ha reconocido que él no era partidario de incluir a todos los partidos nacionalistas "en el mismo cajón" y que, si se decidió así, fue porque Alicia Sánchez Camacho y él cedieron ante la posición de María San Gil porque es "un referente moral y político y creíamos que, en eso, si alguien tenía que ceder éramos nosotros".
Ha negado "rotundamente" que hubiera algún motivo "atribuible directamente al contenido" de la ponencia para que San Gil decidiera abandonarla porque, según ha dicho, fue acordado y suscrito por los tres ponentes el domingo por la tarde, horas antes de que la dirigente vasca anunciara su decisión.
En concreto, ha desmentido que, como aseguró San Gil, los tres ponentes discutieran sobre el concepto de nación –"desde luego conmigo no, y con Alicia tampoco", ha señalado–, y ha dicho que los tres tienen "muy claro" la idea de España como "una nación de ciudadanos libres e iguales".
No ha querido valorar la "mayor o menor legitimidad" de los argumentos de San Gil, con quien admite no haber hablado "ni inmediatamente antes, ni durante, ni después" de que anunciara su decisión.
Abascal y Otaola, cierran filas con San Gil
La agencia de noticias Europa Press dice en una información esta mañana que "la mayoría del PP vasco no desconfía de Rajoy, pero sí de la actitud de San Gil, y espera que rectifique". No da nombres ni apellidos. El jueves se produjo la normal reunión entre diputados populares previa a un pleno del Parlamento. Estuvieron diez de sus quince representantes. En ella, según Ep, le pidieron a la política vasca que rectificara su postura ya que, en su opinión, había actuado de forma "unilateral". Todo, eso sí, bajo un marcado secretismo.
Quienes no tienen problema en decir su nombre son quienes apoyan a María San Gil. Destaca el diputado Santiago Abascal. En declaraciones a este periódico ha recalcado que "los que han filtrado esa noticia son los que tienen que dar explicaciones". Son, asegura, momentos "tristes" para el PP vasco. "Con cobardía y anonimato han filtrado esta noticia", ha sentenciado.
La alcaldesa de Lizarza, Regina Otaola, ha insistido en esta misma idea. Según ha argumentado, el próximo lunes, en el comité regional del partido, "cada uno tendrá que retratarse y veremos lo que realmente pasa". Eso sí, ha recordado que ella también tiene voz y "yo soy 100% de María".
Además, va más allá. En su opinión, "la militancia" está con San Gil al igual que la "casi totalidad" del PP vasco. "María tiene mi confianza y la del PP vasco" pero, advierte, no quiere "hablar más" tras "los últimos movimientos".
Uno de los testimonios más explícitos los aporta una importante dirigente del PP vasco. Sin embargo, prefiere mantenerse en el anonimato para evitar posibles repercusiones. Dice esta política en activo que "hay muchas discrepancias" pero que se hacen bajo en el anonimato, de manera oculta. "Hay gente que está trabajando por detrás para desacreditar a María", ha sentenciado.
"Yo tengo muy claro donde estoy, con María, y ya se verá pero me parece tremendo lo que está pasado", ha concluido.
El PP vasco guarda silencio y dice no tener constancia
Por su parte, desde el gabinete del PP vasco aseguran no tener constancia de la patente crisis interna que vive la formación. Según aseguran, el teletipo de Europa Press les ha dejado "sorprendidos" pero les extraña el anonimato de las informaciones. Argumentan que "de este gabinete no ha salido" la citada información.
Según Ep, diez diputados del Partido Popular en la Cámara de representación del País vasco transmitieron a María San Gil su "malestar y falta de confianza" por sus palabras y, argumentaron para ello, que no contó con la opinión del resto de dirigentes del partido en dicha comunidad. Sin embargo, todas las fuentes consultadas por Libertad Digital desmienten tal afirmación. De hecho, el "yo estoy con María" ha sido la opinión más repartida.