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Atribuyen a ETA la colocación de tres bombas sin detonador halladas en Bayona

La Gendarmería francesa ha localizado este viernes en la localidad de Bayona tres artefactos explosivos. Previamente se había recibido una llamada anónima que anunció la colocación de las bombas. Estaban compuestas por bombonas de butano y un sistema pirotécnico pero no tenían detonadores, por lo que no podían explosionar. El anunciante terminó su mensaje con un "el País Vasco no está en venta". Los investigadores sospechan de la autoría de ETA una semana después de que la prensa gala alertara de que los etarras se estaban rearmando. Pese al alto el fuego, empresarios de Navarra también han recibido en los últimos días cartas de extorsión con el sello etarra.

(Libertad Digital)
Las tres bombas estaban compuestas por bombonas de butano y un sistema pirotécnico, pero no tenían detonadores, por lo que era "imposible" que estallarán, según fuentes próximas a la investigación citadas por la Agencia EFE. La principal hipótesis que manejan los investigadores apunta a la autoría de ETA aunque el comunicante anónimo que anunció la colocación de los artefactos no se identificó como miembro de la banda terrorista. Únicamente terminó la comunicación con un "el País Vasco no está en venta".

Los tres bombas estaban colocadas en contenedores de basuras cerca de las instalaciones de la Gendarmería en Bayona, el aeropuerto de Biarritz y la oficina de turismo de Cambo-les-Bains. Las mismas fuentes han recordado que "no es la primera vez que sucede algo así" en Francia.

 
El hallazgo de los explosivos se produce después de que los etarras anunciaran un alto el fuego permanente. Sin embargo, y pese a este anuncio, empresarios de Navarra han recibido en los últimos días cartas de extorsión con la firma de ETA. También la prensa francesa ha alertado de que la banda terrorista continúa con sus actividades de aprovisionamiento en Francia.
 
Así lo afirmaba hace algo más de una semana Le Figaro, que ponía como ejemplos el robo de coches y de documentación, los entrenamientos de terroristas y la extorsión. "A juzgar por el número de coches encontrados y de robos imputados a ETA, casi diarios desde hace quince días, nada ha cambiado", sostenía. Además, sólo horas antes del comunicado del alto el fuego, la policía francesa había atribuido a la banda terrorista el robo de una furgoneta y de 700 kilos de explosivos. Se sumaban a las 20.000 placas de matrícula y dos troqueladoras sustraídas a finales de  marzo por otros tres etarras en territorio francés.
 

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