L D (Europa Press) Díez Usabiaga y Barrena, que hicieron las declaraciones en castellano y euskara, respectivamente, comparecieron en San Sebastián junto los dirigentes de Batasuna-ETA y de LAB Joseba Permach y Ainhoa Etxaide, cuando este jueves se cumple el plazo para que hagan efectivas las fianzas que les impuso el juez Fernando Grande-Marlaska como condición para la libertad provisional.
El secretario general de LAB consideró que las últimas actuaciones de Grande-Marlaska contra dirigentes de Batasuna-ETA no se pueden "blanquear con determinadas posiciones" de la Fiscalía, y su objetivo es "descabezar o diezmar" a ese sector. A su juicio, la acusación de "inducción" a la comisión de acto violentos es una "auténtica barbaridad jurídica" que busca la "persecución y el castigo político".
El dirigente del sindicato proetarra LAB denunció que, "el informe inicial, básico, sobre el que se soporta la actuación de Grande-Marlaska" fue realizado por la Ertzaintza. Según dijo, desde este informe, "y con la complementariedad de otros realizados por la Guardia Civil y la Policía Nacional", el juez "diseñó" y "soporta su posición y actuación posterior".
Asimismo, afirmó que ese informe estuvo "avalado por determinadas declaraciones de miembros del Gobierno vasco y dirigentes del PNV, que en su momento de una u otra manera llegaron a soportar lo que jurídicamente luego el juez ha venido a desarrollar para generar las imputaciones". "¿Es esto una casualidad o realmente existía un impulso político-policial necesario para luego generar toda esta actuación?, planteó, para después señalar que no responderán a esa pregunta, pero que "el tiempo dará contestación" a la misma. No obstante, consideró que la "responsabilidad política directa" de esas actuaciones es del PSOE, a quien advirtió de que "no puede estar con un mano ofreciendo un escenario de paz y con la otra agrediendo a la izquierda abertzale para intentar neutralizar al PP".