(Libertad Digital) Este jueves, el dirigente de la formación ilegalizada Pernando Barrena, acompañado por los miembros de la Mesa Nacional Joseba Permach, Ainara Armendariz y Juan José Petrikorena, ha explicado en una nueva rueda de prensa los motivos del voto del Partido Comunista de las Tierras Vascas, partido al que no citó, en el pleno de investidura.
El batasuno Pernando Barreda abogó también por la creación de una mesa fuera del Parlamento vasco, en la que estén representados todos los partidos políticos, incluidos el PSE, PP y UPN, y cuya labor sea "diseño del modelo de la transición política" en el País Vasco. En ese sentido, pidió "flexibilidad" al PSE-EE, al que le recordó que ETA ha anunciado que no atentará contra cargos socialistas y populares.
Dijo que "los dos votos que ayer fueron necesarios" para proclamar a Ibarretxe como lehendakari, en referencia a los otorgados por los batasunos de las Tierras Vascas, fueron "en la clave de exigencia de pasar de las palabras a los hechos, de pasar del papel que todo lo aguanta a la práctica política, en base abrir nuevos escenarios para este país, y priorizar un escenario de paz".
Preguntados sobre la negativa del PP y PSE a sentarse en una mesa con la Batasuna-ETA, Joseba Permach dijo que "los efectos de todos los acontecimientos que se están produciendo en ningún caso van a tener su efecto ni en 24 ni 48 horas". Además, recordó que ETA ha anunciado que "dejaba fuera de sus objetivos armados" (atentados) a cargos de PP y PSE, que calificó de "buena noticia". A su juicio, "poco a poco, por encima de las diferencias que tengamos, tenemos que demostrar todos una mayor flexibilidad y sobre todo responsabilidad política". "Eso es lo que le pedimos a Pastor y al PSE", dijo. De esa manera, se refirió a las declaraciones en las que el portavoz del PSE en el Parlamento vasco, José Antonio Pastor, dijo que no se sentará con Batasuna "mientras no haya una condena expresa o cese de la violencia".
