L D (Europa Press) El juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo se ha inhibido en favor de los Juzgados de Instrucción de Madrid para que diluciden las responsabilidades en las que podría haber incurrido el director del diario "El Mundo", Pedro J. Ramírez, al no entregar la copia del sumario de los atentados de Madrid que tenga en su poder, como le había sido requerido.
Del Olmo ha adoptado esta decisión ante el escrito presentado hoy por "El Mundo", en el que se niega a entregar la copia del sumario amparándose en el secreto profesional y el artículo 20 de la Constitución, que protege el derecho a la libertad de información y de opinión. La respuesta de Pedro J. Ramírez, a la que tuvo acceso Libertad Digital, dice así:
- "En contestación a su requerimiento, le comunico que todo el material verbal o escrito con el que realizan sus informaciones o reportajes los periodistas de este diario está acogido al secreto profesional y al derecho a no revelar las fuentes de información, al amparo de lo dispuesto en el artículo 20 de la Constitución Española".
En el requerimiento que el juez remitió al director de "El Mundo" se advertía de que en el caso de no presentar cualquier soporte en el que tuviera copia de los tomos del 11-M sobre los que se había levantado el secreto, se deduciría testimonio por un delito de desobediencia a autoridad judicial previsto en el artículo 556 del Código Penal.
El juez justifica su decisión diciendo en el auto por el que envía las actuaciones a los Juzgados de Plaza de Castilla, que lo hace "para, salvaguardando la libertad de información, asegurar otros bienes dignos de protección especialmente los que afectan a la protección integral de los testigos protegidos". Añade que "uno de ellos se reseña pormenorizadamente en la noticia publicada, con datos que hacían evidente su plena identificación".
"El requerimiento -agrega el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6- obedecía estrictamente a evitar que se continuara con una actividad que podía poner en riesgo la integridad personal, la tranquilidad y seguridad de testigos protegidos, así como de otras personas que aparecían en los tomos cuyo alzamiento del secreto se ha acordado."
En este sentido, Del Olmo señala que el requerimiento "se adoptó en aras de preservar la función jurisdiccional, a fin de evitar mayor daño a la seguridad de los testigos protegidos". Recuerda que, además de la testigo que aparece en la información de "El Mundo", en los tomos en los que se ha levantado el secreto figuran más testigos protegidos.
Tras explicar que la remisión se ha producido ante la negativa del periódico a entregar los soportes requeridos, menciona que se ha producido "un manifiesto abuso de derecho" por parte de quien ha recibido el soporte documental y que está obligado, por la Ley de Enjuiciamiento Criminal, a preservar ese secreto y lo ha incumplido.