(Libertad Digital) La misma actitud que han mostrado Zapatero o Rubalcaba cuando han sido cuestionados sobre la autoría de ETA en el robo de 350 armas en Francia es la que ha adoptado este viernes la vicepresidenta primera. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, María Teresa Fernández de la Vega no ha querido pronunciarse de forma clara.
Como el presidente y el ministro, De la Vega se ha limitado a apuntar que "el robo es una acción grave". Para dentro de "unos días o una semana" ha anunciado que habrá más información, "y si finalmente se comprueba que es ETA, que es problabe que pueda serlo, diría dos cosas: que estamos ante un hecho grave que vamos a perseguir hasta el final y cuyos autores serán enjuiciados. Y dos, que es un acto completamente estéril e inútil si lo que se pretede es usarlo como método de presión".
Más cerca del discurso de Rubalcaba que del enigmático de Zapatero sobre las "consecuencias", la vicepresidenta ha repetido que "las reglas hay que cumplirlas siempre, no hay otro camino". Y nuevamente en su discurso ha introducido la manida expresión de "el proceso será largo, duro y difícil". Esas reglas ha vuelto a decir que son "ausencia total de violencia, legalidad, diálogo y acuerdo".
Para justificar que el Gobierno siga sin pronunciarse sobre esa autoría etarra que tanto la policía gala como las fuentes de la lucha antiterrorista dan por segura, la vicepresidenta ha explicado que "el Gobierno no ha dejado de trabajar, estamos recabando toda la información, con todos los medios de que dispone el estado de Derecho, los datos de la investigación y el análisis oportuno". Para "unos días o una semana" habrá más información. Hasta entonces, ha dicho, "permítame que mantegamos el espíritu de reserva; es un asunto muy serio que afecta a la seguridad del Estado y hay que actuar con responsabilidad y firmeza".
Acusa al PP de "antipatriótico" por rechazar la resolución en la Eurocámara
Ante la pregunta de si el proceso está suspendido, De la Vega explicó que, "como su nombre indica, es un proceso". "El Gobierno se mueve, no está quieto" dijo, antes de añadir que "el Gobierno sigue cerciorándose de la autentica voluntad de ETA del fin definitivo de la violencia". "Se han producido algunos acontecimientos", y "hemos seguido comprobando para actuar con la certeza de la verdadera voluntad de fin definitivo de la violencia", indicó. "Somos y seremos exigentes a la hora de asegurarlo", insistió. "El tiempo, después de 40 años, no nos va a condicionar", prometió antes de decir que "sosiego y fortaleza son los términos que resumen posición la posición del Gobierno".
También se refirió a la reciente votación en la Eurocámara de la resolución socialista para apoyar el proceso y la ajustada mayoría obtenida. De la Vega respondió enumerando el enorme apoyo que, según ella, tiene la negociación con ETA. "El Parlamento Europeo ha hablado y hay que aceptar lo que ha dicho, esa es la democracia", indicó, antes de decir que "lo que ha ocurrido es un paso más en el respaldo" que, según ella, se está dando al proceso abierto con ETA.
La vicepresidenta indicó que les apoya "la mayoría de nuestros socios europeos", "la Comisión Europea, el Secretario General de la ONU, los sindicatos, los empresarios, todos los partidos menos unos, buena parte de los gobiernos autonómicos, infinidad de organizaciones de todo tipo, personalidades de la política mundial, escritores..." Y concluyó la lista diciendo que también les apoya "la inmensa mayoría de los ciudadanos".