Menú

Diputados del PP temen "una caza de brujas" por las críticas a la gestión de Soraya

Los 154 diputados del PP están llamados a una reunión extraordinaria con la dirección de su grupo el próximo lunes. Bajo el paragüas de la crisis económica, Soraya Sáenz de Santamaría intentará acallar las críticas surgidas en los últimos días. Una "caza de brujas" que preocupa, y mucho, en la bancada popular.

Soraya, Rajoy y su falta de liderazgo
Los 154 diputados del PP están llamados a una reunión extraordinaria con la dirección de su grupo el próximo lunes. Bajo el paragüas de la crisis económica, Soraya Sáenz de Santamaría intentará acallar las críticas surgidas en los últimos días. Una "caza de brujas" que preocupa, y mucho, en la bancada popular.
LD (Pablo Montesinos) Los diputados del PP que han alzado su voz contra la falta de coherencia, firmeza y liderazgo de Soraya Sáenz de Santamaría temen represalias. "Una auténtica caza de brujas" que se formalizará, según ha podido saber Libertad Digital, en una reunión extraordinaria fechada para el próximos lunes.
 
Concretamente, los 154 diputados populares están llamados, a la una de la tarde, a una reunión con la dirección del Grupo Popular. Será un encuentro a puerta cerrada en el que, teóricamente, se tratarán temas exclusivamente económicos, principalmente referidos a los Presupuestos Generales del Estado. Sin embargo, según fuentes consultadas por este periódico, en el discurso de Sáenz de Santamaría habrá hueco para una dura reprimenda a los suyos.
 
Pocas horas antes de esta cita, la portavoz del PP en el Congreso se reunirá con su círculo más cercano. Será en el habitual despacho con sus portavoces adjuntos, en el que podría concretar una batería de medidas que irían desde la amonestación pública y el endurecimiento de las sanciones internas hasta el requerimiento de actas parlamentarias. Ya lo advirtió recientemente la propia Sáenz de Santamaría en un medio de comunicación: "el que no quiera venir que renuncie a su escaño".
 
Nervios "de la tercera fila hacia atrás"
 
Los diputados aguardan, no sin preocupación. Advierten que estas reuniones no son habituales. De hecho, la dirección tardó más de seis meses para convocar la última, que contó con la presencia conjunta de diputados y senadores. "El comentario de represalias está, y se puede escuchar por los pasillos", nos advierte un dirigente popular, que asegura que no se callará ante la nefasta gestión de su portavoz. "De la fila tercera hacia atrás hay un desánimo patente, uno de cada tres diputados te lo dirán, no se cuidan las relaciones humanas y no se hace oposición", lamenta.
 
Una situación confirmada por otro diputado: "antes teníamos una posición común y en todos lados podíamos defender los mismos intereses, ahora no y estamos preocupados". Sin embargo, desde la dirección del Grupo Popular "se lanza el mensaje de que todos los males son por culpa de Acebes y Zaplana, fueron los malos antes y son los malos ahora".
 
Ejemplo de la crisis, añaden fuentes consultadas, es el último barómetro del CIS. Un empate técnico entre PP y PSOE que demuestra que "algo no se está haciendo bien". En una situación "tan catastrófica" para el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el PP "no despierta optimismo ni está motivando a la gente". Algo a lo que se suma que "Rajoy sigue siendo el dirigente peor valorado por los españoles".
 
El estatuto de Castilla La Mancha
 
En este sentido, la dirección del Grupo Popular está especialmente nerviosa por lo que pudiera estar por llegar. Según ha podido saber Libertad Digital, Sáenz de Santamaría teme que la rebelión interna pudiera sumar un capítulo irreversible cuando el estatuto de Castilla La Mancha vuelva a ser debatido en la carrera de San Jerónimo. Entonces, en solidaridad con la Región de Murcia, podrían no acatar la disciplina de voto diputados de Andalucía y la Comunidad Valenciana. "Se puede armar un follón muy gordo", nos aseguran.
 
En opinión de un veterano diputado popular, su partido estaría intentando "maquillar" un texto "claramente inconstitucional" manteniendo reuniones con dirigentes del PSOE al más alto nivel. Sin embargo, muchos miembros del PP no aceptarían esta posibilidad, y podrían responder desacatando las órdenes de su portavoz en el Congreso. "Decían que querían terminar con la guerra del agua y mira como estamos", sentencia.
 
Así las cosas, los diputados esperan "expectantes" y no sin cierta preocupación la reunión del lunes. "Las cosas están muy complicadas", aseguran desde el propio círculo de Soraya Sáenz de Santamaría. En Génova esperan que, tras el encuentro de la semana próxima, no se vuelvan a escuchar más críticas. En caso contrario, la debilidad de la mano derecha de Rajoy quedaría ratificada y la situación podría volverse insostenible.

Temas

En España

    0
    comentarios