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El Congreso rechazará el próximo martes el Plan Ibarretxe y no lo negociará con el Parlamento vasco

El próximo martes 1 de febrero el Congreso rechazará el plan secesionista de Ibarretxe. La Junta de Portavoces del Congreso ha fijado para la citada fecha el debate de toma en consideración del plan del lehendakari, que se desarrollará según lo previsto, de forma que, al no contar con el apoyo de la mayoría de la Cámara, el texto quedará definitivamente rechazado por el Parlamento. Del mismo modo, no habrá negociación posterior alguna del proyecto con el Parlamento vasco.

El próximo martes 1 de febrero el Congreso rechazará el plan secesionista de Ibarretxe. La Junta de Portavoces del Congreso ha fijado para la citada fecha el debate de toma en consideración del plan del lehendakari, que se desarrollará según lo previsto, de forma que, al no contar con el apoyo de la mayoría de la Cámara, el texto quedará definitivamente rechazado por el Parlamento. Del mismo modo, no habrá negociación posterior alguna del proyecto con el Parlamento vasco.
L D (Agencias) No habrá sorpresas y el Congreso rechazará el próximo martes 1 de febrero el plan separatista del lehendakari Ibarretxe. Para ese día se ha fijado la toma en consideración del proyecto separatista, que se votará en contra, según lo previsto por el acuerdo entre PSOE, PP y CC.
 
Además, fuentes parlamentarias informaron de este acuerdo a Efe y señalaron que tanto PSOE, PP y CC rechazaron las peticiones de PNV e IU-ICV para que el proyecto de nuevo Estatuto para el País Vasco tuviera una tramitación que permitiera la presentación de enmiendas y un análisis conjunto entre el Congreso y el Parlamento de Vitoria.

La Mesa de la Cámara, oído ya el parecer de la Junta de Portavoces, se reunirá ahora para rechazar oficialmente esa vía alternativa de trámite, en cuya defensa PNV e IU-ICV están dispuestos a acudir al Tribunal Constitucional.

El trámite aprobado supondrá que la sesión plenaria del próximo martes se iniciará con la defensa del plan Ibarretxe por parte de una delegación del Parlamento vasco (de hasta un máximo de tres miembros), seguirá con la fijación de posición de los grupos parlamentarios y concluirá con una votación en la que, de acuerdo con lo anunciado, el proyecto quedará rechazado.

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