L D (EFE) Según informaron a EFE fuentes jurídicas, el tribunal deducirá ahora testimonio a Díaz de Mera de forma oficial con el objeto de que se investigue si cometió un delito de desobediencia grave a la autoridad (penado con un máximo de un año de cárcel), al negarse a identificar a la persona que le informó acerca de un informe policial sobre vinculaciones entre ETA y los atentados.
Aunque en un principio se prevé que esta deducción de testimonio será remitida al Tribunal Supremo para que inicie dicha investigación, las fuentes consultadas aseguraron que el tribunal del 11-M debe determinar aún qué órgano es el competente para tramitar esta causa.
Junto a la certificación de que Díaz de Mera es parlamentario, la Sala adjuntará el acta del juicio de la sesión en la que el ex director general de la Policía, que también fue multado con mil euros, persistió en su negativa a colaborar con la Justicia revelando la identidad de la fuente que le comunicó la existencia de dicho informe, tal y como le pidió insistentemente el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez.
De ser finalmente remitida toda esa documentación al Supremo, éste órgano deberá decidir si solicita al Parlamento Europeo el suplicatorio para que le sea retirada la inmunidad como parlamentario a Díaz de Mera ante la posible existencia de indicios de delito en su actuación ante el tribunal del 11-M.
En el caso de que se acuerde esa petición de suplicatorio, el presidente del Supremo será el encargado de tramitarlo para que sea remitido al Parlamento Europeo, al que corresponde finalmente decidir si le retira la inmunidad a este eurodiputado para ser encausado en relación al delito que le imputó el tribunal cuando declaró, el pasado 28 de marzo.
Tras haberse opuesto a colaborar con la Justicia, Díaz de Mera recapacitó y el pasado 10 de abril remitió un escrito al tribunal en el que revelaba la identidad del policía que dijo que le habló de ese informe, así como la del agente que supuestamente lo elaboró y que días después también declararon como peritos en el juicio: los comisarios Enrique García Castaño y Domingo Pérez Castaño, respectivamente.
Fuentes jurídicas informaron en su día de que esta decisión de Díaz de Mera podría condicionar a la que adopte el Tribunal Supremo respecto a la petición de suplicatorio al Parlamento Europeo, ya que éste tribunal podría llegar a considerar que con su revelación ha colaborado con la Justicia y por tanto ha quedado subsanado el delito del que se le acusa.
Aunque en un principio se prevé que esta deducción de testimonio será remitida al Tribunal Supremo para que inicie dicha investigación, las fuentes consultadas aseguraron que el tribunal del 11-M debe determinar aún qué órgano es el competente para tramitar esta causa.
Junto a la certificación de que Díaz de Mera es parlamentario, la Sala adjuntará el acta del juicio de la sesión en la que el ex director general de la Policía, que también fue multado con mil euros, persistió en su negativa a colaborar con la Justicia revelando la identidad de la fuente que le comunicó la existencia de dicho informe, tal y como le pidió insistentemente el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez.
De ser finalmente remitida toda esa documentación al Supremo, éste órgano deberá decidir si solicita al Parlamento Europeo el suplicatorio para que le sea retirada la inmunidad como parlamentario a Díaz de Mera ante la posible existencia de indicios de delito en su actuación ante el tribunal del 11-M.
En el caso de que se acuerde esa petición de suplicatorio, el presidente del Supremo será el encargado de tramitarlo para que sea remitido al Parlamento Europeo, al que corresponde finalmente decidir si le retira la inmunidad a este eurodiputado para ser encausado en relación al delito que le imputó el tribunal cuando declaró, el pasado 28 de marzo.
Tras haberse opuesto a colaborar con la Justicia, Díaz de Mera recapacitó y el pasado 10 de abril remitió un escrito al tribunal en el que revelaba la identidad del policía que dijo que le habló de ese informe, así como la del agente que supuestamente lo elaboró y que días después también declararon como peritos en el juicio: los comisarios Enrique García Castaño y Domingo Pérez Castaño, respectivamente.
Fuentes jurídicas informaron en su día de que esta decisión de Díaz de Mera podría condicionar a la que adopte el Tribunal Supremo respecto a la petición de suplicatorio al Parlamento Europeo, ya que éste tribunal podría llegar a considerar que con su revelación ha colaborado con la Justicia y por tanto ha quedado subsanado el delito del que se le acusa.