L D (EFE) El político asturiano señaló, en rueda de prensa, que los planteamientos del BNG de definir Galicia como nación y de incorporar comarcas asturianas o castellano-leonesas "no tendría ninguna importancia" si la formación nacionalista no gobernase en coalición con los socialistas gallegos. Además, Ovidio Sánchez aprovechó para anunciar que su partido presentará iniciativas parlamentarias tanto en la Junta General del Principado como en el Congreso y en el Senado para mostrar su rechazo a esta propuesta.
A su juicio, esta cuestión "nunca habría llegado ni a los titulares de la prensa" si no fuera porque el PSOE "los necesita para gobernar", al haber optado en su "interés por mantenerse en el poder" y buscar sus apoyos "no entre quienes defienden a España, sino entre quienes quieren romper la Constitución". Según Sánchez, la "debilidad" del Gobierno central le lleva a sufrir permanentemente el "chantaje" de los partidos nacionalistas que, "en lugar de adoptar sus estatutos a la Constitución", pretenden ajustar la Carta Magna "a sus intereses partidistas y a sus pretensiones de ruptura de España".
El dirigente popular aseguró que su grupo se mantendrá "vigilante" ante esta propuesta, "que el señor (José) Blanco no ha rechazado explícitamente", y que supone un intento de fomentar "enfrentamientos entre pueblos, regiones y ciudadanos" que generan "un gasto de energía estéril para todos los españoles".
A su juicio, esta cuestión "nunca habría llegado ni a los titulares de la prensa" si no fuera porque el PSOE "los necesita para gobernar", al haber optado en su "interés por mantenerse en el poder" y buscar sus apoyos "no entre quienes defienden a España, sino entre quienes quieren romper la Constitución". Según Sánchez, la "debilidad" del Gobierno central le lleva a sufrir permanentemente el "chantaje" de los partidos nacionalistas que, "en lugar de adoptar sus estatutos a la Constitución", pretenden ajustar la Carta Magna "a sus intereses partidistas y a sus pretensiones de ruptura de España".
El dirigente popular aseguró que su grupo se mantendrá "vigilante" ante esta propuesta, "que el señor (José) Blanco no ha rechazado explícitamente", y que supone un intento de fomentar "enfrentamientos entre pueblos, regiones y ciudadanos" que generan "un gasto de energía estéril para todos los españoles".