L D (EFE) La propuesta surge tras la polémica abierta por la imagen de un miembro de los antidisturbios golpeando a una joven tras una manifestación en Madrid contra la guerra de Irak y “ante las inercias desatadas pretendiendo llevar a cabo medidas negativas para los casi dos mil integrantes de dichas unidades”. El SUP pretende que se regule la actuación de estas unidades como, aseguran sus representantes, existe en otros países democráticos de nuestro entorno y que en esta regulación se detalle cuando un antidisturbios debe hacer uso de “la fuerza legítima”.
Por ejemplo, según señala el sindicato, ante una manifestación ilegal que no acepte la canalización policial; cuando se haga apología del terrorismo, cuando se ocasione daños en bienes públicos o privados, cuando se ejerza violencia contra los policías o atendiendo al conflicto de intereses entre manifestantes y otros ciudadanos.
El SUP considera que la actuación del mencionado antidisturbios , al que la Dirección General de la Policía le ha abierto una investigación y que ha sido apartado de los servicios de calle temporalmente, no fue acertada, pero entiende que “en el contexto en que se produjo hay circunstancias que deben ser tenidas en cuenta en su descargo”. Por ello, los representantes sindicales aseguran que no pueden permitir “un linchamiento sin juicio de ningún compañero, por duras que sean las imágenes y desafortunada que nos haya parecido su actuación”. El SUP subraya que “hay que saber que esa noche, los miembros de la UIP se enfrentaban a miembros muy violentos y organizados, que había decenas de compañeros heridos y que llevaban más de 30 horas acumulada de servicio en las últimas 48 horas, lo que había provocado en algunos de ellos agotamiento físico y mental, origen de una acción desafortunada”.
Por ejemplo, según señala el sindicato, ante una manifestación ilegal que no acepte la canalización policial; cuando se haga apología del terrorismo, cuando se ocasione daños en bienes públicos o privados, cuando se ejerza violencia contra los policías o atendiendo al conflicto de intereses entre manifestantes y otros ciudadanos.
El SUP considera que la actuación del mencionado antidisturbios , al que la Dirección General de la Policía le ha abierto una investigación y que ha sido apartado de los servicios de calle temporalmente, no fue acertada, pero entiende que “en el contexto en que se produjo hay circunstancias que deben ser tenidas en cuenta en su descargo”. Por ello, los representantes sindicales aseguran que no pueden permitir “un linchamiento sin juicio de ningún compañero, por duras que sean las imágenes y desafortunada que nos haya parecido su actuación”. El SUP subraya que “hay que saber que esa noche, los miembros de la UIP se enfrentaban a miembros muy violentos y organizados, que había decenas de compañeros heridos y que llevaban más de 30 horas acumulada de servicio en las últimas 48 horas, lo que había provocado en algunos de ellos agotamiento físico y mental, origen de una acción desafortunada”.